La eléctrica italiana Enel, principal accionista de la española Endesa, anunció hoy que ampliará este año su capital hasta en 8.000 millones de euros para reforzar la estructura financiera del grupo y reducir su deuda hasta los 45.000 millones al cierre del ejercicio. El grupo, que ganó 5.293 millones de euros en 2008, un 35,2 por ciento más que un año antes, explica en una nota que con esa ampliación podrá obtener un beneficio neto de 4.000 millones este año y avanzar en su plan estratégico, que prevé una inversión de 32.600 millones hasta 2013, cuando el beneficio neto llegaría a los 5.000 millones.

Enel añade que el Ministerio de Economía y Finanzas de Italia, en calidad de accionista de la compañía, ha manifestado su interés en adherirse a dicha ampliación de capital y que la operación está garantizada por un consorcio de entidades financieras.

El consejero de administración de la compañía, Fulvio Conti, argumenta que una vez completada la política de crecimiento internacional del grupo, hay que pensar en la cesión de los activos no estratégicos y un plan de inversión selectivo acompañado de la mejora de la eficiencia.

Todo ello, en opinión de Conti, permitirán a Enel estar preparada para cuando se produzcan los primeros signos de mejoría de la economía y los mercados financieros.

Además, según las previsiones de la eléctrica italiana, con su plan estratégico hasta 2013 el resultado bruto de explotación (EBITDA) podrá llegar a los 16.000 millones de euros en 2010 y a los 18.000 millones en 2013.

Gracias a la ampliación, Enel, que elevará su participación en Endesa hasta el 92 por ciento este año después de acordar en febrero la compra a la constructora Acciona del 25 por ciento que poseía en la española, no verá incrementada su deuda al cierre de este año respecto a 2008, cuando se situó en 49.967 millones.

Según sus previsiones, el mayor capital de la eléctrica y los 10.000 millones que espera ingresar hasta 2010 con la venta de activos renovables contribuirán a que su endeudamiento siga bajando hasta 45.000 millones a finales de 2009 y hasta los 41.000 millones en 2013.

Ese nivel de deuda supondría entre 2,5 y 3 veces respecto al valor del EBITDA, lo que el grupo considera le haría mejorar su calificación crediticia del A- hasta el A.

Además, Enel prevé dedicar unos 10.000 millones de euros en este ejercicio y el próximo con el objetivo de reducir su endeudamiento.

En cuanto a las inversiones, el grupo italiano, que destaca que es hoy un protagonista mundial de la energía con posición de líder en numerosos mercados, destinará un total de 32.600 millones de euros en el periodo 2009-2013.

Esa inversión se llevará a cabo para preservar la posición estratégica global del grupo y para poder seguir creciendo orgánicamente.

Enel anunció también que propondrá una nueva política de dividendo basada en un "pay out" del 60 por ciento del beneficio ordinario a partir de 2009.