"Sin la certidumbre de una oferta por el grupo o de un remedio para el déficit de capital regulatorio, la Autoridad de Servicios Financieros (FSA) tomó ayer la decisión de imponer un requerimiento al permiso de la compañía para prevenirla de aceptar depósitos, con lo que la compañía es incapaz de renovar los depósitos a vencer", señaló la entidad en un comunicado.
Por su parte, la Administración británica ha asegurado a los afectados por la situación de la entidad que todo el mundo recibirá su dinero del Fondo de Compensación de Servicios Financieros, incluso aquellos por encima del límite de las 50.000 libras.

