El Producto Interior Bruto de Portugal se contrajo tres décimas el último trimestre del año en comparación con el incremento del trimestre anterior de un 0,2%.

En tasa interanual, la economía lusa aumentó un 1,2% frente al 1,3% del mismo periodo del año anterior. Detrás de esta subida se encuentran las exportaciones y la industria automovilística, mientras que el gasto en vivienda marcó la vuelta a tasas negativas de crecimiento.

Se ralentizó, además, el consumo de los hogares, a pesar del incremento de ventas de automóviles, del mismo modo que la inversión que se redujo durante el último trimestre del año, aunque de forma menos pronuniada.