El Ibex 35 se viste de verde para esperar los tan ansiados test de resistencia. La jornada se ha movido en rangos muy amplios aunque al final los datos sobre el clima empresarial del IFO en Alemania han animado las bolsas europeas y en concreto al Ibex,  que se sitúa con holgura por encima de los 10.300 puntos.
 
Durante toda la jornada las palabras más repetidas han sido “test de stress”. Sin embargo, el grueso de los expertos opina que los resultados de estos análisis de resistencia no van a traer nada que no se sepa ya. Los grandes bancos parece que no van a mostrar problema, de hecho se espera que BBVA y Santander se sitúen en el vagón de cabeza de los bancos europeos. Más problemas parece que van a tener las cajas.
 
Con todo esto el sector financiero cierra con una visible distinción entre la banca mediana y los grandes bancos. Mientras estos últimos operan en positivo al cierre, Santander suma un 1,34 y BBVA un 0,95%, los hermanos medianos esperan con más prudencia que optimismo a los “stress test”; Bankinter y Popular se han dejado un 0,71% mientras que Banesto y Sabadell han recortado por debajo del medio punto porcentual.
 
Entre los demás pesos pesados del Ibex, Telefónica es el que menos ganancia presenta al sumar un 0,36%; le sigue Iberdrola que ha sumado al cierre un 0,59% mientras que Repsol se ha hecho al cierre con un 1,14%.
 
Las alzas más abultadas de la jornada se las ha apuntado OHL al repuntar un 3,82%. Le sigue Iberia que ha sumado un 3,21% mientras que cierra el podio Gamesa, al apuntarse un 2,75%.
 
En el lado contrario de la tabla Abertis es el valor más perjudicado por los inversores al cierre. La compañía se ha dejado un 3,71%. Los demás valores en negativo han cerrado con pérdidas por debajo del punto porcentual.
 
En cuanto al mercado continuo Funespaña, Sniace y EADS son los que mejor rendimiento han presentado mientras que los valores más perjudicados de la sesión al cierre han sido San José, Fergo Aisa y Bodegas Riojanas.