El Ibex 35 terminó hoy prácticamente en tablas (+0,5%) una semana sosa marcada por la lucha del selectivo madrileño por mantenerse en la cota psicológica de los 11.000 puntos, y por el aniversario de los mínimos anuales de 2009, cuando llegó a bajar hasta los 6.817 puntos y retrocedió a los niveles de 2003.

Los inversores han superado el pánico imperante en marzo de 2009 ante los datos que ponían cara a la peor crisis desde la Segunda Guerra Mundial, y ahora se han instalado en la indefinición, ante la incógnita de cuánto tiempo queda para que se emprenda la recuperación.

En lo que va de año, el principal indicador de la Bolsa española lleva perdido un 7,2%, sin que los últimos cinco días hayan servido para mitigar el retroceso anual, tal y como sucedió con el optimismo de los inversores de la semana pasada, que regaló al selectivo un jugoso repunte del 6,65%, el mayor desde junio.

El Ibex estrenó el lunes a tan sólo diecinueve puntos por encima de los 11.000 y logró sellar su séptimo día consecutivo de subidas, pero la racha alcista se quebró el martes (-0,68%) dejando al indicador de puntillas sobre dicha referencia (11.002 enteros).

El Ibex logró remontar el miércoles (+1%) y recuperó la cota de los 11.100 animado por el empuje del sector financiero en Wall Street, pero volvió al rojo el jueves (-0,68%) y se colocó en la parte pobre de los 11.000, bailando de nuevo al son de los ánimos cambiantes de la plaza neoyorquina, y arrastrado por la subida de los precios en China.

La atención de los inversores sigue fijada en los mercados dedeuda y en los planes de los gobiernos para reducir los déficit provocados por las medidas anticrisis, escenario aliñado por las huelgas generales en Grecia ante los planes del Gobierno heleno de reconducir la situación, y por el proyecto europeo de crear una institución comunitaria a imagen del FMI.

En España, el panorama lo oscureció el Banco Central Europeo (BCE), que considera que el objetivo de saneamiento del déficit público contemplado por el plan de austeridad del Gobierno para cumplir con el Pacto de Estabilidad en 2013 se ajusta a las recomendaciones, pero no viene respaldado por medidas concretas.

SABADELL, LIDER.

El mejor comportamiento del Ibex en los últimos cinco días correspondió a Sabadell, que se anotó un 8,68%, y el segundo puesto del ranking de mayores subidas se lo llevó Abengoa (+5,57%), al calor de informaciones sobre la salida a bolsa de una filial de energías renovables, seguida de Sacyr (+5,54%) y Acerinox (+3,67%).
En el territorio negativo, el mayor retroceso semanal fue para Ebro Puleva (-5,34%), arrastrada por la intención de Caja España y Caja Duero de vender sus participaciones en el grupo, de un 5,16% y un 6,15%, cuando las condiciones de mercado lo permitan.

Telecinco, inmersa en su fusión con Sogecable, también se tiñó de rojo (-3,31%), acompañada por valores del sector energético, como Gamesa (-2,17%), Gas Natural (-0,89%) e Iberdrola Renovables (-0,79%), pero también por Mapfre (-1,55%) y Grifols (-0,68%).

En el sector financiero, sólo Santander terminó con recortes (-0,29%) en una semana de consenso sobre la lentitud del proceso de reestructuración financiero en España, con el enfoque en las cajas de ahorros, según expertos y organismos oficiales.

Tras Sabadell, los mejores comportamientos de la banca fueron para Popular (+2,54%) y BBVA (+1,15%), con avances superiores a los del selectivo madrileño, pero también salvaron la semana con ganancias Bankinter (+0,63%) y Banesto (+0,45%).