Habrá que ver si el Banco Popular continúa es capaz de contener las caídas que le han provocado un descenso en la cotización de más del 20% después de que su nuevo presidente, Emilio Saracho, comentara en la Junta de Accionistas el lunes lo que el mercado llevaba meses temiendo, que necesitará una nueva ampliación de capital para salir adelante, o una fusión.
Se trataría de la tercera ampliación de capital para los accionistas del Popular desde 2012 que ya han visto cómo su participación en la entidad no deja de diluirse al tiempo que la capitalización de la compañía está ya muy cerca de 2.700 millones de euros. Hay que recordar que la última vez que el banco pidió dinero a sus accionistas recaudó 2.500 millones de euros, prácticamente lo que vale ahora en bolsa.
Por otro lado, algunas firmas de inversión descuentan que en estos momentos ya hay algunas entidades financieras españolas estudiando la operación. Es decir, queda actividad en el Popular para algún tiempo.
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Como explican los expertos de Link Securities en su informe diario “es factible que estos rumores sirvan de ”soporte” para la cotización del banco”. En la entidad señalan claramente a BBVA como uno de los bancos que podría hacerse con el control del Popular. Explican que las acciones de la firma que preside Francisco González “podrían ser penalizadas por los inversores más cortoplacistas”.
Poca noticias desde el flanco empresarial por el momento. Tan solo se ha conocido que Kutxabank ha reducido su participación en Iberdrola hasta el 1,69% en un proceso ordenado de aligeramiento de su cartera de participadas.
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Por otro lado, Miquel y Costas descuenta hoy el dividendo con cargo a los resultados de 2016 por un importe de 0,124088 euros por acción que se hará efectivo el próximo 19 de abril.
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Pendientes hoy también durante la sesión del inicio de publicación de resultados de tres grandes bancos de Estados Unidos: JP Morgan, Wells Fargo y Citigroup. Estas tres firmas dan el pistoletazo de salida al grueso de la temporada de resultados (que ya ha comenzado en este país).
La mayor parte de los expertos consideran que si alejamos la geopolítica de las bolsas, serán las cuentas de las cotizadas las que podrían servir como catalizador para las mercados.
Pero hasta que esto ocurra, serán los movimientos en el tablero del juego de la política internacional lo que va a seguir dirigiendo las decisiones de los inversores. De hecho, las declaraciones de la pasada noche de Donald Trump, el presidente de Estados Unidos, en las que decía que el dólar estaba “demasiado fuerte” ha provocado que la divisa americana se deprecie en las últimas horas.
Según indican los expertos esta caída del dólar podría hacer que hoy viéramos un comportamiento más débil de las compañías exportadoras europeas. En este entorno podríamos seguir viviendo durante esta sesión previa al paro del viernes y el lunes, una huida de los inversores hacia los activos refugio, tal y como ha ocurrido en los últimos días.
Por el momento, el oro comienza en máximos desde el pasado mes de noviembre, en 1.272 dólares por onza. El barril de brent, por otro lado, amanece con ligeras subidas de poco más del 0,1%, en 55,83 dólares.