Si la tendencia continúa durante lo que resta de año fiscal, añadieron, el déficit anual sería de 1,3 billones de dólares, 300 millones menos de los que había pronosticado el Gobierno estadounidense hace dos meses.

El diario precisa que la Casa Blanca no realizará ninguna declaración oficial sobre el déficit hasta que se realice la última revisión de los datos, prevista para finales de verano. Las fuentes consultadas por el 'Washington Post' hablaron en condición de anonimato porque los resultados de que disponen hasta el momento son preliminares y temen que el déficit vuelva a crecer a final del ejercicio fiscal, que concluye el 30 de septiembre.

El Partido Demócrata se enfrenta a una complicada campaña electoral de cara a las elecciones legislativas que se celebrarán a mediados de Noviembre. Los republicanos están utilizando el alto nivel de déficit fiscal previsto para este año, el mayor desde el final de la Segunda Guerra Mundial, como una de sus principales bazas electorales.