La caja anunció, además, que tendrá que dotar provisiones por importe de 250 millones de euros después de que la inmobiliaria Martinsa-Fadesa -que le adeuda 1.000 millones de euros- presentara solicitud de concurso de acreedores.En los resultados semestrales de La Caixa, que vio retroceder su beneficio neto el 13,7%, hasta 1.060 millones de euros, influyó de forma decisiva el hecho de que la caja destinara íntegramente a dotaciones para riesgos del negocio los ingresos extraordinarios de 225 millones de euros generados en este periodo, frente a los 250 millones anotados por este concepto un año antes.Además, la tasa del morosidad se triplicó, al pasar del 0,38% de hace un año al 1,26% del mes de junio.
Caixa Catalunya, por su parte, ganó 314,9 millones de euros, el 107,9% más, un resultado en el que influyó la venta del 5,5% de Abertis, en la que obtuvo unas plusvalías de 500 millones.La entidad publicó estos resultados el mismo día que su Consejo de Administración aprobaba la remodelación de la cúpula directiva para afrontar "con más confianza" los retos de la crisis económica y mejorar en cuatro pilares: liquidez, solvencia, rentabilidad y morosidad, según explicó.A continuación se situó la entidad valenciana Bancaja
, que ganó 230,5 millones de euros en estos seis primeros meses del año, lo que supuso un incremento del 8,08% respecto al mismo periodo del año anterior.El crecimiento del crédito a clientes continuó desacelerándose hasta el 9,83%, 84.019 millones de euros en volumen absoluto, al tiempo que la tasa de morosidad se había más que triplicado en un año, al pasar del 0,57% al 1,82%, aún así "por debajo de la media del sector", explica la caja, que añade que la cobertura para posibles insolvencias era del 111,87% y las provisiones de fondos alcanzaban los 1.714 millones de euros.Por su parte, la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) obtuvo un beneficio neto de 187,08 millones de euros durante el primer semestre de 2008, lo que supone un aumento del 7,03% respecto al mismo periodo de 2007.En cuanto a la calidad de activos, el índice de mora ha crecido hasta alcanzar el 1,69%, porcentaje inferior al del conjunto de las cajas de ahorro.Por último, Caixa Galicia presentó un beneficio semestral neto de 179,64 millones de euros, que fue casi idéntico a los 178,90 millones ganados un año antes, ya que la entidad gallega dotó 220 millones a provisiones para protegerse de posibles insolvencias, "estableciendo un colchón para afrontar los próximos trimestres".De hecho, y de la misma manera que ocurre en el resto de entidades españolas, la caja vio aumentar su índice de morosidad hasta el 1,45%, con una cobertura del 130%, al tiempo que la inversión crediticia crecía a tasas cercanas al 6% y los recursos en balance lo hacían al 9,2%.