El banco europeo mantuvo los tipos de interés en el 4% la semana pasada, si bien los analistas consideran que con estas advertencias sobre los riesgos a la baja para el crecimiento prepara a los mercados para un próximo recorte del precio del dinero. La entidad consideró que esos riesgos para el crecimiento económico están relacionados con "un impacto mayor de lo esperado de la evolución de los mercados financieros sobre las condiciones de financiación y el sentimiento económico".Este impacto, según el BCE, podría tener "efectos negativos sobre el crecimiento en el área euro y el resto del mundo". El banco europeo señala, además que, la subida de los precios del petróleo y otras materias primas suponen también un riesgo a la baja para la reactivación de la economía. "Las más recientes informaciones sobre la actividad económica a finales de año apuntan hacia un crecimiento más moderado en el área del euro que la tasa entre trimestres del 0,8% observada en el tercer trimestre de 2007", agregó la institución europea en el informe.Además, el BCE recuerda que el Indice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) fue en enero de 3,2%, comparado con 3,1% en los meses de noviembre y diciembre lo que confirma la continua presión al alza sobre la inflación a corto plazo", por el encarecimiento del petróleo y los alimentos, precisó la entidad.Según los pronósticos de la entidad europea, el IPCA permanecerá "significativamente por encima del 2% y se moderará solamente de forma gradual a lo largo de 2008".No obstante, la entidad califica de "sanos" los fundamentos de la economía de la zona del euro, que "no tiene grandes desequilibrios".Para el BCE,
"la ralentización de las economías de algunos de los principales socios comerciales del área euro probablemente tendrá un impacto sobre el Producto Interior Bruto (PIB)" de los países que comparten la moneda única en 2008.Sin embargo, la entidad europea prevé que tanto la demanda interna como externa sean un apoyo para el crecimiento continuo.