La ministra animó a los fabricantes de materiales de construcción a que mantengan el peso correspondiente al sector en el PIB y que apuesten por las oportunidades que ofrece la rehabilitación, la sostenibilidad y la eficiencia energética. El presidente de Cepco, Rafael Fernández, se mostró muy contento con la afirmación de la ministra de que la construcción debe volver a ser el motor de la economía, porque a su juicio "no es necesario cambiar de modelo".
Fernández recalcó que "para que la economía marche tendrá que volver a marchar el sector de la construcción". Aseguró que si no se toman las medidas adecuadas de forma urgente, la cifra de parados en la industria auxiliar, que hasta el momento asciende a 85.000, se incrementará en 100.000 más este año.
El presidente de Cepco explicó que las empresas centradas en la construcción han reducido su actividad a la mitad en el primer trimestre del año respecto a 2007, caída que en el caso de las compañías centradas en la edificación residencial aumenta hasta el 80%. Fernández indicó que a esta caída de la actividad se suma la morosidad, por lo que demandó a la ministra que se acorten legislativamente los plazos de pago a los proveedores por parte de empresas y administración, que en 2008 ascendió a 229 días.
No obstante, Fernández se mostró más preocupado por el hecho de que los fabricantes vayan a cobrar finalmente por el material proveído. Asimismo pidió que se reconozca en obras oficiales la deuda de aquellos suministradores y subcontratistas que no vean efectivos sus cobros en un plazo razonable.
Fernández emplazó al Gobierno a que adopte medidas de coyuntura excepcional mediante "incentivos fiscales en los dos próximos años y apoyos coyunturales", lo que, en su opinión, reactivaría el sector de la compraventa de vivienda nueva. Demandó un marco regulatorio claro que dé confianza al inversor así como una seguridad inequívoca en la aplicación normativa en las administraciones

