Durante su discurso de inauguración de la I Conferencia de Banca Internacional del grupo español, Botín demandó también a las autoridades que, además de atender la liquidez, fomenten la transparencia y refuercen la supervisión.El mecanismo de supervisión debe, según Botín, buscar el equilibrio entre solvencia y protección de los consumidores, sin supeditar una a la otra.Para el presidente del Santander, el origen de la crisis financiera internacional no está sólo en el mercado americano ni se ciñe exclusivamente a las hipotecas "subprime"; estos factores simplemente activaron las turbulencias.El problema, advierte, han sido
"los excesos" y la pérdida de referentes en un entorno extraordinariamente favorable, que son, a su juicio, la necesidad de conocer muy bien a los clientes y los productos que se intermedian, la prudencia para no aceptar niveles de endeudamiento desproporcionados, la valoración adecuada de todos los riesgos y la existencia de ciclos económicos y financieros. Política de riesgos
Asimismo, Botín consideró que las entidades deben dedicar "tiempo y atención al más alto nivel" a gestionar con prudencia el riesgo, un campo en el que no es necesario "innovar mucho". Al respecto, subrayó que, en una visita al banco, un ex presidente de la Reserva Federal estadounidense se sorprendió al conocer la política de riesgos del Santander y aseguró que "ningún banco americano" aplicaba una política similar.La función de riesgos debe ser "independiente" del negocio, consideró, y en ella se tiene que implicar la más alta dirección del banco, es decir, que el Consejo "conozca y entienda" el sistema financiero y el negocio en sí.Por eso, Botín insistió en la necesidad de contar con un "fuerte" Gobierno Corporativo dentro de las entidades.Aunque durante años ha habido muchas voces defendiendo a los consejeros independientes de las entidades, señaló el presidente del Santander, lo que realmente se necesitan son consejeros capaces, porque la falta de cualificación de los máximos responsables de algunas entidades ha sido la "causa principal" de su caída. "Son errores que no se pueden volver a cometer", sentenció.Para el presidente de la primera entidad financiera española, las entidades deben además centrarse en un negocio recurrente, basado en la relación con el cliente a largo plazo, porque "es rentable y no necesita inversiones en títulos y estructuras financieras opacas" para generar beneficios.Soluciones a la crisisEn cuanto a las recomendaciones para las autoridades, Botín consideró que las soluciones a la crisis pasan por dejar "claras" las reglas a seguir y por evitar generar "riesgo moral", es decir, no transmitir el mensaje de que se puede actuar sin responsabilidad sobre los errores que se cometen.Así, insistió en que es "fundamental" que el mercado disponga de la máxima transparencia en relación al perfil de riesgos de los integrantes del sistema, porque la magnitud de la crisis ha estado relacionada con la incertidumbre sobre "quiénes y en qué medida" se han visto afectados por ella.Junto a la transparencia, adquieren especial relevancia los mecanismos de control y supervisión, destacó, de manera que los supervisores conozcan profundamente las entidades que supervisan, dicten reglas claras y tengan muy en cuenta que los ciclos económicos y financieros existen y hay que estar preparados.Según Botín, el mecanismo de supervisión debe, además, buscar el equilibrio entre solvencia y protección de los consumidores, sin supeditar una a la otra.Asimismo, insistió en la necesidad "imprescindible" de que en Europa haya una mayor coordinación entre supervisores.En este sentido, subrayó que el Banco de España ha desempeñado un papel "ejemplar", como así ha sido "internacionalmente reconocido".Para el presidente del Santander, si el sistema financiero recupera sus fundamentos, saldrá reforzado de la crisis y podrá continuar contribuyendo positivamente al crecimiento económico.

