El PIB
se anotó una caída trimestral del 0,3% en el cuarto trimestre de 2011, con lo que una contracción en el primer trimestre de este año supondría la entrada en recesión técnica. De hecho, el BdE afirma que entre enero y marzo continuó la "dinámica contractiva" de la actividad, por lo que ya se acumularían dos trimestres de crecimiento negativo para considerar situación de recesión.

Por lo que respecta al conjunto del mercado de trabajo, el perfil de intensificación de la destrucción de empleo que se observó en el cuarto trimestre de 2011 se ha prolongado en los últimos meses. En particular, la cifra de afiliados a la Seguridad Social disminuyó en febrero un 2,6 % (–2,4 % en enero), mientras que la tasa interanual de avance del número de desempleados se aceleró en 0,9 pp, hasta el 9,6 %.

En el mes de febrero, el IPC mantuvo inalterado su ritmo de crecimiento interanual en el 2%. Los precios de la energía, bienes industriales no energéticos y servicios disminuyeron en una décima su ritmo de avance, hasta tasas interanuales del 7,9 %, 0,1 % y 1,3 %, respectivamente. Entre las rúbricas de alimentos, el incremento de los
elaborados permaneció en el 2,8 %, mientras que el de los no elaborados se aceleró en ocho décimas, hasta el 1,8%.