El presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, ya apuntó tras la reunión del Consejo de Gobierno de la institución de noviembre que, ante la mejora de las condiciones en el sector financiero, algunas medidas convencionales podrían dejar de ser necesarias.

"Ante la mejora de las condiciones en los mercados financieros, no todas nuestras medidas de liquidez serán necesarias en la misma medida que en el pasado", dijo Trichet, quien en referencia a las subastas de liquidez a un año añadió que "no cree que el mercado espere que se prorroguen", ya que la institución siempre ha dejado claro que "este soporte no es eterno", y apuntó que la decisión al respecto será tomada en la reunión de mañana, aunque reiteró que la posible retirada de estas medidas se llevará a cabo de manera gradual para evitar cualquier amenaza a la estabilidad de precios a medio plazo

En este sentido, el presidente del Bundesbank y miembro del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE), Axel Weber, expresó recientemente que los estímulos fiscales y monetarios excepcionales aplicados para combatir la crisis no deben incrementarse, y advirtió de que la retirada de los mismos no puede aplazarse indefinidamente.

El banquero alemán reconoció que las medidas expansivas de política monetaria y los estímulos fiscales aplicados por los gobiernos han contribuido a aliviar la recesión y estabilizar la situación de los mercados, pero señaló que "aunque hayan sido necesarios y correctos, no pueden y no deben ser incrementados ni sustituir a una recuperación autosostenible".

Por su parte, los economistas del Servicio de Estudios de BBVA apuntan que el BCE procederá a retirar de manera "muy gradual" la liquidez inyectada al sistema desde el colapso de Lehman Brothers en septiembre de 2008 para evitar el riesgo de recaída en la recesión.

Así, prevén que el BCE determinará en la reunión de mañana el final de las subastas de liquidez con vencimiento a un año, cuya última operación está prevista para diciembre, mientras que esperan que mantenga durante más tiempo la provisión de liquidez ilimitada en el resto de subastas.

EL BCE MANTENDRÁ LOS TIPOS ESTABLES


Por otra parte, desde Morgan Stanley se prevé que el instituto emisor de la zona euro mantenga los tipos estables hasta el segundo trimestre de 2010, cuando podría comenzar un gradual endurecimiento de su política monetaria que dejaría la tasa en el 1,75% a finales del próximo año.

Asimismo, los analistas de Bank of America Merrill Lynch consideran que las diferentes intervenciones de representantes del BCE sugieren que la institución "no tiene prisa" en subir los tipos, pero buscan preparar a los mercados para un eventual endurecimiento de la política monetaria al hacer referencia a la potencial retirada de algunas medidas de estímulo.

De este modo, los pronósticos de la entidad auguran que la tasa continuará en el 1% tras la reunión del próximo jueves y sólo en 2010 se podrían registrar subidas de tipos, que podrían llegar a situar la tasa rectora en el 2,5% a finales de 2010.

Por el contrario, Citigroup pronostica que las posibles subidas de tipos se retrasarán hasta el último trimestre del próximo año, cuando los tipos de interés podrían llegar a alcanzar el 1,25%.

En este sentido, los analistas del Servicio de Estudios de BBVA van más allá al augurar que la institución presidida por Jean Claude Trichet mantendrá el actual nivel de tipos hasta "mediados de 2011" como consecuencia de la fragilidad de la recuperación económica de la eurozona y de las previsiones de que la inflación se mantenga por debajo del objetivo de la institución. Como consecuencia de estas perspectivas, consideran poco probable que se produzcan variaciones significativas en el nivel del Euríbor hasta la segunda mitad de 2011.