El plan, que también incluiría un sistema de depósito de garantía en toda la UE y un fondo de rescate pagado por impuestos sobre las instituciones financieras, se podría lograr el próximo año y sin cambios en los tratados europeos, según dijo José Manuel Durao Barroso.
"Creo que ahora tenemos condiciones para ir más allá", dijo. "Ahora hay una conciencia mucho más clara entre los Estados miembros europeos de la necesidad de ir más allá en términos de integración, especialmente en la zona euro. Esta es una de las lecciones de la crisis".
Sin embargo, George Osborne, el ministro de Hacienda del Reino Unido, insiste en que Gran Bretaña no será parte de un sindicato bancario que haría a los contribuyentes responsables de la recapitalización de bancos.
Barroso sugiere que dicha integración podría lograrse sin cambios en los tratados europeos. No obstante. Alemania podría plantear objeciones, ya que ha insistido en que tales medidas sólo pueden venir con una reforma legal.
Reino Unido considera que estas propuestas "suponen un respaldo financiero único para el euro", algo que el Sr. Osborne cree que es deseable, aunque Gran Bretaña no tomará parte.
Barroso advirtió de que sus planes para una unión bancaria, que comenzarán a ser desarrollados como parte de una hoja de ruta que se presentará en la cumbre de la UE al final del mes, son parte del esfuerzo a largo plazo de la UE para responder a la crisis y no debe ser visto como un sustituto para hacer frente a turbulencias del mercado actual.