Festival alcista del principal mercado del mundo al calor de la noticia de que el Gobierno de Estados Unidos asumió el control de los gigantes del crédito hipotecario Fannie Mae y Freddie Mac y destinó 100.000 millones de dólares para cada uno, con el fin de evitar un colapso del sistema financiero tras la crisis inmobiliaria. La importancia de la suma está dirigida a mostrar “el fuerte compromiso” del Estado para con los “acreedores y los inversores en títulos de ambas compañías”, según explicó el secretario del Tesoro, Henry Paulson. Según el plan aprobado, el regulador estatal puede asumir el control de las firmas tuteladas por el gobierno, de propiedad de accionistas privados, que respaldan préstamos hipotecarios por billones de dólares. Así las cosas, en la apertura las acciones de Freddie Mac caen un 79% y las de Fannie Mae pierden un 86%.En este contexto,
los títulos del Tesoro americano cotizan con pronunciadas caídas. Así, el bono nacional a 10 años y el referenciado a 30 años caen más de un 1 punto. El rendimiento de los bonos a cinco años, por su parte, sube cerca de 20 puntos, mientras que el de dos años avanza 17 puntos. Mientras y también al calor del rescate de las dos hipotecarias, el sector financiero vive su particular “festín comprador”.
Citigroup sube un 9,18% hasta los 20,84 dólares, Lehman Brothers se revaloriza un 9,01% hasta los 17,67 dólares, las acciones de Bank of America se aprecian un 10,08% hasta los 35,47 dólares, Merrill Lynch sube un 8,12% hasta los 28,90 dólares, JP Morgan un 8,21% hasta los 42,87 dólares mientras que Morgan Stanley rebota un 7,47% hasta los 44,31 dólares. El rebote es aún más contundente en las aseguradoras de bonos como Ambac que avanza un espectacular 16,55% hasta los 9,90 dólares mientras que MBIA gana un 11,62% hasta los 18,56 dólares. También Boeing se une al festival alcista y eso a pesar de conocerse que la huelga de trabajadores que comenzó tras no llegar a un acuerdo sobre el convenio colectivo podría tener un coste de más de 3.000 millones de dólares. Esta es la segunda huelga que afronta la compañía desde 2005 y la cuarta en veinte años. Antes del ultimátum, Boeing había propuesto aumentar los salarios de los trabajadores en una media del 11% y ofrecía un bono de 2.500 dólares si se firmaba en la fecha en la que expiraba el anterior convenio. En los primeros movimientos de mercado, los títulos de Boeing avanzan un 1,24% hasta los 63,59 dólares. Gráfico Dow