Las ayudas públicas directas estarán limitadas a 10.000 millones de euros y la compra de productos de riesgo por parte del Estado a 5.000 millones.El paquete de rescate está constituido por 400.000 millones de avales públicos a los créditos interbancarios y 80.000 millones de euros de ayudas directas.Además, el Estado se ha reservado 20.000 millones de euros para el caso de que parte de los citados avales realmente tengan que fluir.Con estas medidas, el Estado se ha propuesto influir en la política empresarial de los bancos con problemas y evitar que una mala gestión pueda conducir a una nueva crisis.
BayernLB podría ser el primro en llamar a la puertaEl banco regional alemán BayernLB podría ser el primero en recurrir al citado paquete, según anunció el ministro de Finanzas bávaro, Erwin Huber.Entre la banca privada, tan sólo el Deutsche Bank ha descartado categóricamente recurrir a las ayudas.Según informaciones del Financial Times Deutschland, algunos bancos privados están estudiando la posibilidad de buscar ayuda mediante una acción concertada que evitaría el "mal trago" de tener que dar el primer paso.La ley puesta en marcha el sábado sólo contempla que los institutos que cotizan en Bolsa y obtengan capital público deberán comunicar que han recurrido a estas ayudas, pero no aquellos bancos que hayan impulsado el negocio interbancario gracias a los avales.

