Así, el Dow Jones ha abierto con una corrección del 0,19%, el Nasdaq del 0,27% y el S&P 500 del 0,18%. El Russell 2000, el índice de pequeñas y medianas empresas de la Bolsa de Nueva York, se anota una subida del 0,4%.

Los futuros de Wall Street apuntan caídas en la pre apertura

En el mercado de materias primas, la cotización del barril tipo West Texas, de referencia en EEUU, se revaloriza un 0,6% y alcanza los 69,93 dólares, a un paso de recuperar el umbral de los 70 dólares.

La fecha para la entrada en vigor de los nuevos aranceles estadounidenses a los productos chinos se acerca y el gigante asiático ve cómo la tensión comercial entre ambos países comienza a dejarse notar ya en su sector industrial. Según una encuesta publicada por Reutersesta madrugada, explica desde IG, Aitor Méndez, la actividad fabril de China apunta a una nueva desaceleración en el mes de agosto, la tercera consecutiva.

El sondeo hacía sonar las alarmas esta madrugada en las ya de por sí preocupadas bolsas chinas y los números rojos aparecieron de nuevo. El índice compuesto de Shenzhen era el peor parado, con una caída del 1,45%, seguido por el de Shanghái (-1,14%) y el China A50 (-1,11%).

Los recortes llegaban también a Hong Kong (-1,01%), Corea del Sur (-0,07%) e incluso Australia (-0,01%), pero no así a Japón, que escapaba a las ventas con un avance del 0,11%. El selectivo nipón llegó a estar incluso por encima de los 23.000 puntos durante algunos momentos de la sesión, una cota que no visitaba durante las últimas once semanas.

Mientras tanto, en los mercados europeos se acentúan los descensos, con el Dax alemán a la cabeza de las caídas acercándose al punto  porcentual.

Todo ello, después de que ayer el acercamiento de posturas entre Canadá y su vecino del sur para alcanzar un acuerdo a tres bandas con México que renueve el Tratado Libre Comercio de América del Norte (TLCAN/NAFTA) “sirviése de bálsamo a las bolsas norteamericanas, pero no así a las del resto del mundo, que ve cómo la guerra abierta entre las dos primeras potencias económicas supone un riesgo real para el crecimiento global”, explica Aitor Méndez, de IG.

El presidente Donald Trump apuntó este miércoles que confiaba en que un acuerdo entre las dos naciones estaba al alcance. "Creo que Canadá quiere llegar a un acuerdo", según apuntó Trump a los periodistas el miércoles.

Ayer, el  mayor optimismo mostrado por Washington y Ottawa de cara alcanzar un nuevo acuerdo antes del viernes permite a Wall Street dejarse llevar por el impulso de su sector tecnológico y renovar sus máximos históricos al cierre por cuarto día consecutivo.

De este modo, el índice Nasdaq finalizó la jornada en los 8.109,26 puntos (+0,99%), el S&P en los 2.914,04 (+0,23%) y el Russell 2000 en los 1.734,52 (+0,35%), niveles todos ellos nunca visto en un cierre de sesión. El Dow Jones también cerró al alza, en los 26.12,57 enteros (+0,23%).

Las solicitudes de desempleo subieron levemente 213.000 la semana pasada, pero se mantuvieron cerca de mínimos de varias décadas ya que la tendencia subyacente todavía apunta a un mercado laboral que se contrae. El ingreso personal aumentó 0,3% en julio.

La economía estadounidense creció un 4,2% entre abril y junio, una décima más de los previsto en la primera lectura del PIB, según publicaba la Oficina de Análisis Estadístico del Departamento de Comercio del Gobierno de Estados Unidos.  Estos datos han pillado por sorpresa al mercado, que espera que se corrigiese a la baja su estimación inicial del 4,1% al 4%.