Apertura con tendencia mixta en Wall Street. El Dow Jones cae un 0,35% y el S&P 500, un 0,13%; mientras que el Nasdaq sube un 0,12%.
Con el Dow Jones en los 23.664,29 puntos, Apple lidera las subidas del índice con un repunte del 0,61%, por delante de Merck y de Cisco Systems, que se revalorizan un 0,54% y un 0,43%, respectivamente.
Por el contrario, la mayor caída es la de Dow, que cede un 1,79%, seguido de Chevron, que recorta un 1,66%, y de Raytheon, que baja un 1,50%.
El Dow Jones y el S&P 500 arrancan la jornada con caídas, en contra de lo que han ido anticipando los futuros a lo largo de la mañana europea, tras la conferencia del presidente de la Reserva Federal (FED), Jerome Powell.
"La atención de hoy estará puesta en lo que dirá Powell ante la presión de la Casa Blanca para que la Fed adopte tasas de interés negativas, como en Europa", señala Eugen Weinsberg, analista de Commerzbank.
Analistas coinciden en señalar que las posibilidades de que eso ocurra son muy bajas, a pesar de que ayer, el presidente Donald Trump volvió a presionar al banco central estadounidense para que recorte las tasas de interés a territorio negativo, tras conocerse que la inflación en EEUU bajó al 0,8% en abril.
La semana pasada, los mercados financieros estuvieron incorporando a sus opciones un ambiente de tasas negativas en Estados Unidos por primera vez en la historia, ya que los inversores están cada vez más alarmados con las consecuencias económicas de la pandemia de coronavirus.
La Fed enfría los ánimos en Wall Street
En su discurso, Powell ha hecho un austero análisis sobre la situación económica de Estados Unidos antes de una esperada reapertura, advirtiendo sobre un "un periodo extendido" de debilidad en que la Fed usará todas las herramientas necesarias para afrontar la crisis.
Para un gobernador de la Fed que ha pasado parte de su carrera controlando déficit y que ha intentado evitar ofrecer recomendaciones a autoridades del Gobierno, los comentarios de Powell reflejan una extraordinaria admisión de los riesgos para la economía estadounidense derivados de la pandemia de coronavirus.
Hasta la fecha, la respuesta de Estados Unidos "ha sido particularmente rápida y resuelta", dijo Powell en una conferencia de video pregrabada, en la que también llamó a emplear todos los programas fiscales disponibles para ayudar a los estadounidenses más vulnerables.
"Pero podría pasar algún tiempo hasta que la recuperación gane impulso", dijo, y añadió que este periodo estará dominado por los avances del país en la lucha contra el coronavirus.
La apertura con tendencia mixta en Wall Street se produce tras las caídas de ayer, una jornada centrada en la incertidumbre por la reapertura económica de EEUU, las tensiones geopolíticas con China y la fuerte caída de los precios al consumo.
Wall Street reaccionó con caídas al testimonio ante los legisladores del principal epidemiólogo del gobierno estadounidense, Anthony Fauci, quien dijo que el coronavirus no está "bajo control" y que la cifra de más de 80.000 muertes confirmadas hasta ahora en el país, epicentro de la pandemia, probablemente sea superior.
En un momento en el que varios estados han empezado a reabrir sus economías, como Texas y Georgia, y otros como Nueva York, el más afectado, se preparan para ello, Fauci advirtió que un levantamiento demasiado rápido de las restricciones para contener al COVID-19 puede provocar nuevos brotes y "muertes evitables".
La atención en Wall Street también se mantiene en las relaciones entre EEUU y China, después de que los republicanos del Senado estadounidense propusieran ayer una legislación que autorizaría al presidente de Estados Unidos a imponer sanciones de gran alcance a China, si es que Pekín no entrega una cuenta completa de los acontecimientos que condujeron al brote del nuevo coronavirus.
El proyecto de ley autorizaría al presidente a imponer una serie de sanciones, como la congelación de activos, la prohibición de viajar y la revocación de visados, así como restricciones a los préstamos a empresas chinas y la prohibición de que compañías chinas coticen en las bolsas de Estados Unidos.
En lo que respecta a nuevos estímulos fiscales, y según varias fuentes, en EEUU el partido demócrata va a presentar un nuevo plan de ayuda, valorado en 3 billones (españoles) de dólares, que se añadiría a los planes de más de 2 billones ya aprobados.
La votación podría llevarse a cabo tan pronto como este viernes si bien también se publica que este nuevo paquete tiene pocas opciones de ser aprobado en el Senado. Este nuevo paquete incluiría ayudas de unos 800.000 millones a estados y gobiernos locales, una nueva ronda de pagos directos a los ciudadanos, ayudas para pagar el alquiler de viviendas e hipotecas, pagos a personal expuesto al virus en primera línea o financiación para votar por correo.