El impecable repunte de Wall Street se enfrentará en las próximas semanas ante un gran tropiezo advierte el estratega de JPMorgan Chase, Nikolaos Panigirtzoglou. El mismo señala que se avecina una venta de acciones por 150.000 millones de dólares por parte de los administradores de dinero más grandes, según Denitsa Tsekova en Yahoo Finance.
JPMorgan proyecta que las carteras de dinero real, incluidas las de riqueza soberana y fondos de pensiones, retrocederán a favor de los bonos para cumplir con los objetivos de asignación, en los mayores flujos de reequilibrio a la clase de activos desde el cuarto trimestre de 2021. “El periodo de reorganización podría reducir hasta un 5% el precio de las acciones mundiales”, según estimaciones de Panigirtzoglou.
Los fondos de pensión y otros inversionistas institucionales verifican sus exposiciones de mercado para asegurarse de que cumplan con los estrictos límites de asignación entre acciones y bonos cada fin de mes y trimestre. La renta variable ha superado a los bonos en lo que va del trimestre, lo que ha dejado a los gestores de cartera en la necesidad de reducir su exposición a las acciones para cumplir sus objetivos a largo plazo.
“La última vez que tuvimos tal brecha con acciones y bonos en direcciones opuestas fue en el cuarto trimestre de 2021”, indicó Panigirtzoglou. “Este flujo de reequilibrio podría generar una corrección de alrededor del 3 % al 5 % en las acciones”.
Los fondos de pensiones y de riqueza soberana que forman la columna vertebral de la comunidad inversora suelen reequilibrar sus exposiciones de mercado cada trimestre para lograr una combinación de 60% de acciones y 40% de bonos o una exposición similar. En lo que va del trimestre, el índice bursátil de todos los países de MSCI ha subido un 5%, mientras que el índice de bonos global agregado de Bloomberg ha bajado un 1.3%.
Según los cálculos de JPMorgan, el Fondo de Inversión de Pensiones del Gobierno de Japón de 1.5 billones de dólares o GPIF, el fondo de pensiones más grande del mundo, tendría que vender 37 mil millones de dólares en acciones para volver a su asignación de activos objetivo. El fondo petrolero noruego de 1.3 billones de dólares podría mover 18.000 millones de dólares de acciones a bonos, mientras que el Banco Nacional Suizo podría vender acciones por valor de 11.000 millones de dólares.
Los portavoces de SNB se negaron a comentar, mientras que Norges Bank Investment Management, que administra el fondo petrolero noruego, no respondió. Un portavoz de GPIF no respondió de inmediato a un correo electrónico fuera del horario comercial en busca de comentarios.
“Los planes de pensiones de beneficios definidos de EE. UU., que administran 8.5 billones de dólares en activos, necesitarían cambiar hasta 185 mil millones de dólares de acciones y comprar cantidades netas similares de bonos para cumplir con sus objetivos a largo plazo”, agregó JPMorgan. La cantidad podría ser menor ya que los fondos de pensión definidos de EE. UU. son menos estrictos con respecto al reequilibrio que los fondos mutuos y otros inversionistas institucionales.