“Todo el mundo está preocupado de que no se preocupa de nada porque nadie está preocupado sobre nada. A todos nos gusta estar complacidos, pero no queremos que los demás sepan que estamos complacidos”. Es la original reflexión de los analistas de Morgan Stanley.

“Muy bien, lo admitimos. No estamos preocupados por nada en estos momentos. Somos como Bob Marley ¿Y qué más da si nadie se preocupa? Todos sabemos que el Gobierno no puede mantener la creación de 1 billón de dólares en un ordenador para comprar sus propios títulos”, añaden estos expertos.

Aunque su conclusión no es nada tranquilizadora. “Sin duda, esto parece una estafa gigantesca que finalmente acabará de mala manera, incluso en el mejor de los casos, si la Fed diseña un aterrizaje suave” (en referencia al final escalonado de la QE).

Por su parte, Capital Economics afirma que “cuanto más mantenga el banco central su política pro-estímulos, mayor será el riesgo de inflación futura y de formación de burbujas en el precio de los activos”.

C.P.O.