Titular sobre nuestro país en la portada de CNBC: “España emerge de dos años de recesión”. Y, dentro de la noticia, podemos leer: “La economía española salió de una recesión de dos años en el tercer trimestre, según datos preliminares divulgados el miércoles. El PIB creció un 0,1% en el tercer trimestre, en línea con las previsiones de los analistas consultados por Reuters. Esto marca un punto de inflexión para la cuarta economía más grande de la Zona Euro, que había sufrido su octavo trimestre consecutivo de contracción en el segundo trimestre de 2013”.

Buenas noticias, por tanto, para nuestro país (“la jornada comienza con buen tono. Las cifras de PIB se han situado en positivo, lo que será un buen catalizador para el Ibex35”, decían a primera hora los expertos de Bankinter), que han llevado a nuestro selectivo a subir más de un 1% durante la primera parte de la jornada. Eso sí, a media sesión el Ibex se ha desinflado y, en línea con el resto de índices europeos, suma un 0,43% arriba (9.901 puntos). En este sentido, nuestros analistas advierten de que debemos tener cuidado: “Durante gran parte de la sesión hemos asistido a un fuerte rally alcista que, poco a poco, parece desinflarse. Les recuerdo que nuestro índice presenta un gap bajista en los 10.013 puntos y el máximo de la sesión de hoy se ha marcado en los 9.980 puntos. Digamos que lo que ha hecho, por el momento, ha sido rellenarlo parcialmente. Si desde aquí nuestro índice siguiera perdiendo terreno habría que empezar a barajar que, quizás, el rebote de ayer y hoy pretendía eso, rellenar parcialmente o en su totalidad este hueco para coger carrerilla a la baja de nuevo en busca del primer soporte de verdad, el de los 9.439 puntos”, explica José María Rodríguez.

Estamos, por tanto, en un “punto de inflexión”, como comentan en CNBC, y no sólo en lo que respecta a nuestra economía sino, también, en lo que se refiere a nuestro Ibex. La pregunta es si se irá a corto plazo a por los 9.400 o a por los 10.000, y la respuesta varía por minutos según va cambiando la trayectoria de nuestro selectivo. Es decir, los expertos no tienen nada claro el rumbo que tomará. Eso sí, lo que es una realidad es que ya estamos en niveles de 9.900 puntos, con lo que realmente esos 10.000-10.013 puntos están “a tiro de piedra”.

Y los bancos son los que están contribuyendo, también hoy, a las subidas que está registrando nuestro selectivo. En la jornada de ayer les decíamos que parecía que se iba a iniciar un rebote en el sector desde mínimos, y eso es lo que estamos viendo hoy también. Eso sí, destaca la debilidad de BBVA respecto al resto (tanto ayer como hoy) mientras que Popular, que mañana publica cifras, es el segundo título que más sube del Ibex, con alzas del 2,32%. Por delante de él se sitúa ArcelorMittal y aquí también cabe destacar que ayer mismo les dijimos que su aspecto técnico llevaba a esperar un rebote inminente (Arcelor gana un 2,42%). Y en el lado más negativo del Ibex lleva todo el día Viscofan, que ha llegado a perder un 8%. Dicen los expertos de Bankinter que sus cifras son "decepcionantes" (las publicó ayer, tras el cierre), al contrario que las de Renta 4 (que no sólo ha sorprendido con una importante mejora del beneficio sino también con el anuncio de reparto de dividendo. Renta 4 suma ahora un 1,33% en el Continuo). Por lo demás, REE y Abertis apenas se mueven tras haber publicado hoy unas cifras en línea.

En cuanto a otras referencias del día, por supuesto estamos pendientes de la reunión de la Reserva Federal. El comunicado se publicará a las siete de la tarde hora española. Parece que hay unanimidad a la hora de no esperar novedades respecto al tapering. Eso sí, será interesante saber qué previsiones maneja el banco central tras el shutdown del Gobierno y la incertidumbre fiscal.

Por último, recordamos que hoy se publicarán otros datos relevantes, como la encuesta de empleo privado ADP, que podría mostrar cierta debilidad, ya que es un registro de octubre y, por lo tanto, se habría visto afectada por el shutdown y, también, cifras de IPC, que reflejarán que no hay presión desde el lado de los precios. “Si se confirmara este escenario, sería positivo para el mercado, ya que proporcionaría argumentos adicionales a la Fed para que mantenga el actual QE3”, señalan desde Bankinter.

Nieves Amigo