Pese a la pequeña caída del índice tecnológico de Wall Street, la renta variable estadounidense sigue en máximos anuales con la confianza de los inversores, consumidores y empresarios en máximos tras la aprobación de la reforma fiscal prometida por el presidente Donald Trump.
Los inversores de Estados Unidos están recogiendo ganancias y la rotación de activos se está imponiendo en estos últimos días. El aspecto técnico de Wall Street sigue siendo bueno y no se han perforado soportes importantes.
El principal dato económico de este miércoles ha sido la publicación del informe de empleo privado de la consultora ADP. El sector privado de Estados Unidos fue capaz de generar durante el pasado mes de noviembre 190.000 nuevos empleos, 45.000 puestos de trabajo menos en comparación a las cifras de octubre (su mejor dato desde marzo), pero que hace que el mercado laboral estadounidense continúe creciendo a un ritmo "sólido", según los datos de ADP.
"El mercado laboral sigue creciendo a un ritmo sólido. En particular, la producción ha creado la mayoría de los puestos de trabajo durante todo el año", declaró Ahu Yildirmaz, vicepresidente y codirector de ADP Research Institute, según recoge Europa Press. La productividad laboral del tercer trimestre ha crecido un 3% y los costes laborales han bajado un 0,2%.
El consenso de los analistas esperaba 185.000 nuevos empleos gracias al sector servicios (155.000 empleos) y de la industria (40.000 empleos), algo que anticipa buenos datos para el Informe de Empleo que se publicará el próximo viernes.
En el ámbito político, Donald Trump reconocerá esta tarde Jerusalén como capital de Israel y trasladará la embajada de Estados Unidos allí, una ciudad en disputa entre Palestina e Israel y objeto de negociación en el conflicto entre árabes e israelíes. La Cámara de Representantes de EEUU, además debe alcanzar un acuerdo por el techo de gasto para evitar que la Administración Trump tenga margen de maniobra en materia presupuestaria.
Las bolsas asiáticas, por su parte, han caído este miércoles a mínimos de dos meses ante la debilidad de los precios de los metales y la preocupación por la política monetaria en China.
El euro se cambia a 1,1801 dólares y se deprecia un 0,21% frente a la divisa estadounidense. El bitcoin, por su parte, está cerca de llegar a los 13.000 dólares y se revaloriza un 1.500% desde diciembre de 2016.
El precio del petróleo cae ante la subida de los inventarios de productos refinados en Estados Unidos, lo que el mercado interpreta como síntoma de debilidad de la demanda. El West Texas, de referencia en Estados Unidos, cae un 1,34% hasta los 56,85 dólares por barril, mientras que el barril de Brent, de referencia en Europa, se deja un 1,1% hasta los 62,16 dólares. Esta misma tarde se publican los inventarios de crudo en EEUU.