Los descensos vistos en el mercado en los últimos meses han afectado, como no podía ser de otra forma, a la evolución técnica del Santander. El valor ha perdido la parte baja del movimiento lateral del corto plazo que presentaba en los 6,25, extendiendo así la corrección iniciada a mediados del mes de octubre. Por el momento, nada parece mostrarnos el final de la toma de beneficios, si bien hay que destacar que su tendencia alcista sigue siendo buena y que, más pronto que tarde, veremos la vuelta de las compras.
El nivel clave de resistencia cuya superación nos invitaría a pensar en la continuación de las alzas se encuentra en los 6,35 euros. Mientras que se mantenga cotizando bajo este nivel lo más sensato sería mantenerse al margen, aunque muy pendientes de un aumento del volumen ya que es uno de los valores que creemos que continuará subiendo en los próximos meses.
C.N.