Aunque Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE), reconoce algunas señales de mejora, advierte contra ser “excesivamente optimistas” debido a la debilidad de la recuperación.
“Vemos algunas señales alentadoras, pero la recuperación en la Zona Euro es todavía débil y dispar”, ha comentado en una entrevista con Neue Zürcher Zeitung publicada en la página del BCE. “Después de todo, los riesgos son bajistas. Por lo tanto, yo tendría mucho cuidado con ser excesivamente optimista”, ha añadido.
Draghi ha explicado que el crecimiento en la región es dispar y que el desempleo, por encima del 12%, es demasiado elevado. Como factor positivo, el jefe de la autoridad monetaria europea considera que la recuperación comienza lentamente a pasar de las exportaciones a la demanda interna. A modo de ejemplo sobre la situación actual, comenta que “somos como Estados Unidos hace un año y medio”.
Para ayudar a la recuperación, Draghi recomienda que los Gobiernos sigan adelante con sus esfuerzos de consolidación fiscal, pero señala que las políticas deben comenzar a dar más ayuda al crecimiento. “Es decir, menos gastos actuales e impuestos más bajos y más gastos en infraestructura y en capital humano,” ha especificado. Aun así, insiste en que las reformas estructurales tienen que acompañar estas políticas porque sólo ellas “podrán devolver Europa al camino de crecimiento sostenible”.
Conforme a su papel como banquero central, Draghi ha repetido que la contribución del BCE al crecimiento es mantener la estabilidad de precios y ha vuelto a repetir que no hay señales de deflación. Incluso a la pregunta de si le preocupa más la deflación o la inflación, Draghi ha respondido tajante: “En realidad, ninguna de las dos cosas. Los riesgos de deflación o de inflación están limitados en el momento actual”.
Jason Martin