Los principales selectivos asiáticos cotizan con saldo mixto mientras Wall Street pone fin a un rally de cuatro sesiones y los inversores esperan datos esta tarde que darán pistas sobre la recuperación en la primera economía del mundo. Mark Matthews, analista de Julius Baer, cuenta a Bloomberg que “los precios de la renta variable en Asia son atractivos con las acciones en China en niveles increíblemente bajos. Japón también está bastante barato”.

En el plano macro asiático, cabe destacar que el comercio al por menor de Japón ha registrado una caída interanual del 4,4%, frente al descenso del 3,3% que esperaba el mercado. “Es significativo que el Nikkei se mantenga en verde después de los malos datos de la evolución del comercio minorista en Japón en abril, porque certifica que el mercado ya tenía descontado el impacto del nuevo impuesto a las ventas y el horizonte se despeja”, comenta Ramón Morell, analista de ETX Capital España.

En China, las apuestas por más estímulos monetarios aumentan. En un informe publicado esta mañana, Barclays considera que “la probabilidad de más relajación monetaria significativa en las próximas semanas aumenta”. El banco británico repasa las posibles medidas pero admite que, “aunque la dirección está clara, hay incertidumbre sobre los detalles del próximo movimiento del banco central chino”.

Por último, los mercados asiáticos han cerrado a la espera de la publicación de datos en Estados Unidos. Aparte de las cifras semanales de desempleo, saldrá el PIB del primer trimestre. No se espera un “buen” dato ya que los economistas prevén una revisión del crecimiento americano al terreno negativo. No obstante, los expertos de IG creen que ya está descontado y habrá un rebote en la economía estadounidense en el segundo trimestre. “Si la cifra del primer trimestre sale mejor de lo esperado, por fin podrá llegar la subida del dólar”, comentan. En cualquier caso, los analistas de Rivkin Securities restan importancia del dato. “Los inversores probablemente echarán la culpa al tiempo o la estacionalidad si el dato sale malo”, explican, y añaden que la Fed todavía está dispuesta a actuar si el crecimiento decepciona.

J.M.