Máximos de tres semanas para el Nikkei de Japón, que ha cerrado en los 15.071,88 puntos, tras subir un 0,84%. El índice regional MSCI Asia Pacífico se ha anotado un 0,2% con China como principal protagonista, porque el Gobierno de Pekín ha anunciado que venderá bonos por 24.000 millones de dólares este año para financiar infraestructuras en las regiones menos desarrolladas del país y relajar la presión fiscal sobre las pequeñas empresas.

“El anuncio (en China) mejora el estado de ánimo por la expansión de la inversión, ya que podría allanar el camino para el crecimiento del consumo en el futuro”, opina en Reuters Takuya Takahashi, de Daiwa Securities. Angus Gluskie, director gerente de White Funds Management, indica en Bloomberg sobre la decisión de Pekín que “empezamos a ver conversaciones más positivas por parte de las autoridades en términos de estímulos”.

El estratega de Citi en España, José Luis Martínez Campuzano, enumera los argumentos que han llevado a algunas plazas asiáticas a sus niveles más elevados en cuatro meses: los estímulos por parte de las autoridades chinas; la resistencia a caer de la bolsa en Estados Unidos; y las esperanzas de nuevas medidas expansivas por parte del Banco de Japón (BoJ por sus siglas en inglés). Martínez Campuzano advierte, no obstante, que el PMI de servicios oficial chino ha caído en marzo hasta 54,5 desde 55, aunque el que elabora HSBC ha mejorado desde 51,0 a 51,9. En Japón, esta referencia de Markit ha superado el nivel que separa contracción de expansión, es decir, los 50 puntos. El PMI Servicios del país ha subido en marzo hasta los 52,2 desde los 49,3.

M.G.