Canadá desafía a Estados Unidos al desmarcarse de las sanciones que se le está imponiendo a Rusia, al tener intereses comerciales con Vladimir Putin, según informa Reuters. La misma fuente informa que un miembro del personal de Gobierno canadiense afirma que “nuestro objetivo es sancionar a Rusia, pero no vamos a castigar tampoco a las empresas canadienses con fuertes vínculos” en el país.
Recientemente Stephen Harper, primer ministro canadiense comparó las acciones de Putin en Ucrania con las de Adolf Hitler en los momentos previos a la Segunda Guerra Mundial. Canadá, que tiene 1,2 millones de personas de ascendencia ucraniana, ha impuesto sanciones a más de 80 funcionarios y empresas de Rusia y Ucrania en contrapartida con los 60 funcionarios sancionados por los Estados Unidos. A difernecia de Estados Unidos, Canadá no sancionó a Sergei Chemezov, que dirige el conglomerado industrial y de defensa estatal Rostec, ni tampoco a Igor Schin, director general de la petrolera Rosneft, que posee alrededor del 30% de un yacimiento de petróleo de Canadá. Ambos muy cercanos a Putin en los vínculos comerciales con Ottawa.
Por otro lado, Harper dijo en marzo que "no vamos a darle forma a nuestra política exterior por intereses comerciales" y desde el Gobierno de Ottawa reiteran estas declaraciones a día de hoy.
"Vamos a continuar presionando a Rusia, vamos a seguir en esta línea para imponer sanciones, junto con nuestros aliados, pero también vamos a mirar hacia fuera para los intereses más amplios de Canadá", en relación con los comentarios que salen desde el Gobierno conservador canadiense en referencia a la petición expresa de que los altos empresarios canadienses no acudan al Foro Económico Internacional de San Petersburgo de éste mes de mayo.
Desde la oposición opinan que “es atroz. No es coherente con lo que la retórica del gobierno está en ponerse duro con los rusos y ponerse duros con Putin", según comunicó el portavoz de asuntos exteriores del partido opositor New Democratic Party,Paul Dewar.
J.S.
