El Euro/Dólar lleva 10 días enfrascado en un patrón de consolidación del que parece que no quiere salir, los cruces del yen también mantienen una operativa con estrecho margen, la libra no se decide a atacar los máximos anuales… Estamos viviendo un escenario en el que los majors, o principales cruces del mercado Forex (Foreign Exchange Market), presentan escasas oportunidades para los operadores intradía o de corto plazo y es que la volatilidad en las principales divisas podría estar en mínimos no alcanzados desde antes del inicio de la crisis financiera global.

En concreto, tal y como informa Bloomberg, el índice de volatilidad de las monedas del G7 de JP Morgan declinó hasta un 6,63% el pasado 21 de abril, el nivel más bajo desde junio de 2007. Según explican, los inversores se muestran reticentes a tomar posiciones ante la neutralidad de los bancos centrales y la falta de noticias o cambios en sus políticas monetarias.

Con un Banco Central Europeo (BCE) que tiene poco o nada claro si iniciar una ronda de compra de activos al estilo de la Reserva Federal (Fed) -Quantitative Eassing, QE en inglés- y con un dólar altamente influenciado por la política de la Fed que, a pesar de la retirada paulatina del QE, podría mantenerse acomodaticia por largo tiempo, no parece que la operativa en el Euro/Dólar se vaya a animar. En cuanto al resto de divisas, el patrón se repite: los bancos centrales no empezarán a dar alegrías a los mercados hasta 2015, en el mejor de los casos. La excepción la pone el Banco Central de Nueva Zelanda, que ya ha subido tipos dos veces en lo que va de año, y el Banco de Inglaterra que, si hacemos caso a los rumores, podría aumentar la tasa de interés antes de finales de año.

Y aunque la situación virara hacia un escenario de políticas más agresivas por parte de la Fed o Japón o el BCE se definieran, los operadores de divisas no deberían esperar que la volatilidad aumente hasta pasados de tres a cinco años, según explica Arek Okrasa, coach de FX de London-Trader.

Por fortuna, el mercado Forex ya ha pasado por situaciones parecidas en otras ocasiones y siempre hay alternativas a los cruces principales. En las actuales condiciones, los traders podrían optar por implementar la técnica del carry trade con divisas emergentes como el real brasileño, la rupia india, la lira turca, la rupia indonesia o el rand sudafricano.

Conocidas como las 'cinco frágiles' son una apuesta a tener muy en cuenta. De hecho, David Bloom, director de FX de HSBC, ha explicado que, en respuesta a la baja volatilidad, este banco lleva desde febrero sugiriendo "comprar las 'cinco fabulosas'". Explica el experto que los mercados las han rebautizado de esta forma, o también como las high five, ya que "no se las puede seguir considerando como las 'cinco frágiles' por más tiempo".

Cabe explicar que en 2013 los operadores rehuyeron la estrategia del carry trade, que consiste en pedir prestado en monedas de bajo rendimiento para comprar activos que rinden una tasa más alta. La causa: la volatilidad en las monedas de los mercados emergentes se disparó por los temores alrededor del inicio del famoso tapering en los EEUU.

Pero la situación ha cambiado radicalmente desde finales de febrero ya que las "cinco frágiles" han mostrado un desempeño exultante en los últimos meses, encabezado el ranking de divisas con mejor retorno desde finales de febrero. Y se han vuelto tan apetecibles que han favorecido el resurgimiento del carry trade, que se perfila como la mejor manera de capear la baja volatilidad que se espera en el mercado Forex este año, según los analistas.

Noemí Jansana