Si recuerdan, Acerinox ha sido y es una de nuestras grandes apuestas desde hace ya muchos meses. Nuestra recomendación de compra se lanzó una vez el precio fue capaz de confirmar por encima de la resistencia de los 7,80 euros y, pese a las caídas de las últimas semanas, el título cotiza en este momento en las inmediaciones de los 9 euros. Además, ¿recuerdan que hablábamos de un potencial gran “doble suelo” semanal donde la corrección hacia la “clavicular” le acercaría a niveles entre los 9-9,25 euros? Pues bien, en esas está.

¿Cambiaría algo que el precio perforara a la baja el nivel de los 9 euros? En absoluto. Si los perdiera con fuerza y en velas semanales podemos decir que a lo mejor lo que teníamos delante no era un “doble suelo”. Pero al fin y al cabo esto no significa que haya dejado de subir, ni mucho menos. De hecho, el título sigue siendo alcista y esto es así porque ya ha dejado de construir máximos y mínimos decrecientes. Ahora ya tenemos máximos crecientes y lo que está tratando de construir ahora el precio es un nuevo mínimo creciente desde el que, poco a poco, reestructurarse de nuevo al alza. Fíjense si este título sigue fuerte que con todo lo que “ha llovido” en las últimas semanas cotiza lejos todavía del primer nivel de ajuste/retroceso de Fibonacci del último gran impulso alcista, el del 38,2%, en los 8,80 euros.

Deberíamos acostumbrarnos a ver las cosas más en perspectiva, porque si nos ceñimos al muy corto plazo el mercado nos dará cornadas por todos los lados. Y otra cosa, en el mercado hay que entrar cuando hay que hacerlo y no después. Suele ocurrir que cuando uno entra tarde y se lo piensa dos veces al final, cuando se inicia la corrección (o fase de reacción), entramos en pérdidas, nos entran los nervios, y terminamos saliéndonos de un título que a día de hoy es alcista.

Y, por último, ¿cómo le afectaría una posible salida del Ibex 35? No lo sé, no tengo una “bola de cristal”. Pero hace mucho que ya no está de moda el Ibex 35. Independientemente de reacciones puntuales de corto plazo que luego quedan en el olvido me estoy acordando de lo bien que le sentó a Gamesa salir del selectivo. Entrar en el Ibex 35 no garantiza el éxito y salir de él tampoco supone el fin del mundo.

JM.R.