Repsol ha celebrado en Madrid su Junta General de Accionistas 2016, en la que el Presidente de la compañía, Antonio Brufau, y el Consejero Delegado, Josu Jon Imaz, han presentado los resultados e hitos del ejercicio 2015 y la evolución de los primeros meses de 2016.


Durante su intervención, Antonio Brufau ha destacado la volatilidad de los precios de las materias primas de referencia durante 2015, influidos por un exceso de producción, que en el caso de la OPEP ha estado determinada por incrementos en Irak y Arabia Saudí.
Brufau ha llamado la atención del cambio de rol de la OPEP y el funcionamiento de los precios en una economía de mercado, esto es, oferta y demanda. En este sentido, ha afirmado que en 2016 se está produciendo una estabilización de la oferta y un crecimiento de la demanda, con el correspondiente reflejo en la recuperación de los precios.

Brufau también ha subrayado la necesaria contribución de todas las fuentes en el mix energético. El Presidente de Repsol se ha referido al compromiso de la compañía ante los retos que afronta el sector, sobre todo ante un contexto de demanda creciente: la seguridad de suministro, la competitividad, la accesibilidad, la sostenibilidad y la universalidad.

Asimismo, ha destacado la contribución del sector del petróleo y del gas al bienestar de la sociedad y su papel como garante del crecimiento sostenible, gracias al suministro de energía a precios competitivos. Por su parte, Josu Jon Imaz ha presentado a los accionistas los resultados del ejercicio 2015 y del primer trimestre de 2016, así como los principales hitos de la compañía durante esos periodos. Entre ellos, destaca el Plan Estratégico 2016-2020, con el que Repsol inicia una etapa de puesta en valor del crecimiento alcanzado tras lograr los objetivos fijados en su anterior Plan y culminar la integración de Talisman, otro de los hitos del pasado ejercicio.

La compañía parte de una nueva dimensión y perfil tras haber acometido una operación transformadora de crecimiento con la incorporación de Talisman, que le ha otorgado un alto grado de flexibilidad para tomar decisiones, con una cartera de activos de alta calidad y focalizada en países de la OCDE, de mayor estabilidad.
Para crear valor en cualquier escenario y aumentar la resiliencia, la compañía está llevando a cabo una serie de medidas de eficiencia y gestión de su cartera de activos, que le han permitido situar el punto de generación de caja en 40 dólares por barril, uno de los más bajos del sector.

Imaz ha presentado los resultados del pasado ejercicio, en el que Repsol alcanzó un resultado neto ajustado de 1.860 millones de euros, un 9% más que los 1.707 millones obtenidos en 2014. Este resultado, que mide específicamente la marcha de los negocios, demuestra la fortaleza y resiliencia de la compañía ante escenarios adversos como el actual entorno de precios del crudo y del gas.

En 2015, el modelo de negocio integrado de Repsol demostró su valor, ya que el resultado del Downstream (Refino, Química, Marketing, Trading, GLP y Gas & Power), compensó el bajo ciclo que la caída de los precios del crudo y del gas generó en el Upstream (Exploración y Producción). En este último negocio se puso el foco en la gestión más eficiente de las inversiones, así como en completar la integración de Talisman y maximizar las sinergias anunciadas tras la adquisición de la compañía canadiense.

Durante 2015, Repsol duplicó su producción de hidrocarburos, incrementó significativamente el volumen de reservas y mejoró su cartera de activos, ampliando su calidad y dimensión global con una mayor diversificación geográfica.

En la actualidad, Repsol muestra una mayor proporción de gas en su cartera de activos productivos, combustible clave para el mix energético futuro. Se prevé que el gas gane peso en la matriz energética mundial durante las próximas décadas, entre otras aplicaciones, en la producción eléctrica, sustituyendo a combustibles menos eficientes y más contaminantes como el carbón. El negocio de Downstream tuvo un comportamiento excelente durante 2015, con un incremento de su resultado neto ajustado del 113%, hasta alcanzar 2.150 millones de euros.

Este resultado se vio impulsado por los históricos márgenes de refino y química de Repsol, reforzados por las inversiones en eficiencia y mejora operativa acometidas por la compañía en los últimos años.

Repsol valoró la posible persistencia temporal del contexto de precios deprimidos y realizó en 2015 provisiones extraordinarias por valor de 2.957 millones de euros. Además, el efecto de valorar las existencias a MIFO (criterio contable de valoración de inventarios a coste medio ponderado) tuvo un impacto negativo a lo largo del año de 459 millones de euros.

La compañía generó en 2015 ingresos procedentes de desinversiones y de la compra de bonos emitidos por Talisman, junto a otros resultados no recurrentes. Con todos estos efectos, el resultado neto del pasado ejercicio se situó en 1.227 millones de euros negativos. Dado que la mayor parte de las provisiones realizadas responden al mencionado contexto de precios, éstas se podrán revertir en las cuentas de resultados de próximos ejercicios.

Con estos resultados, la Junta de Accionistas de hoy ha aprobado continuar con la fórmula de retribución de scrip dividend, por un importe aproximado de 0,80 euros por acción para el ejercicio 2015 (considerando el cerrado el pasado mes de enero y el que la Sociedad tiene previsto ejecutar durante los meses de junio y julio).

RESULTADOS DEL PRIMER TRIMESTRE DE 2016

Durante su intervención, el Consejero Delegado de Repsol también ha repasado los resultados obtenidos durante el primer trimestre de 2016, en el que la compañía ha gestionado un entorno muy deprimido de precios del petróleo y el gas. En los tres primeros meses del ejercicio, Repsol alcanzó un beneficio neto ajustado de 572 millones de euros, frente a los 928 millones obtenidos en el mismo periodo del año anterior, en el que se incluían resultados financieros excepcionales, de 500 millones de euros, debidos básicamente a la posición en dólares que tenía Repsol tras cobrar la expropiación de YPF, y cuyo importe se destinó en mayo de 2015 a la adquisición de Talisman.

Las medidas de eficiencia y ahorro que ha implementado Repsol en los últimos meses han favorecido que, a pesar de ese contexto de bajos precios del crudo, los negocios de la compañía hayan tenido un resultado positivo. Tanto el área de Upstream como el de Downstream han mejorado sus resultados respecto a los primeros tres meses de 2015, lo que demuestra la fortaleza y resiliencia de la compañía.

Durante el trimestre, los precios medios del Brent cayeron hasta cotizar en mínimos de los últimos 12 años (26,21 dólares por barril el 11 de febrero). Entre enero y marzo, el precio medio del Brent se situó en 33,9 dólares por barril, un 37% menos que el mismo periodo del año anterior.

Pese a este contexto, el negocio de Exploración y Producción mejoró su beneficio neto ajustado en 207 millones de euros respecto a los tres primeros meses de 2015. Además, la producción aumentó hasta los 714.200 barriles equivalentes de petróleo al día (bep/día), el doble de la obtenida en el mismo periodo del ejercicio anterior.

Por su parte, el negocio de Downstream incrementó su resultado neto ajustado un 4%, apoyado en la solidez del área de refino y el buen comportamiento del área de Química, donde los planes de eficiencia desarrollados permitieron aprovechar la notable mejora del entorno de este sector.

Al cierre de marzo, la deuda neta era prácticamente la misma que al finalizar el año pasado, y se situaba en 11.978 millones de euros, mientras que la liquidez cubría más de dos veces los vencimientos de deuda bruta a corto plazo.

RENOVACIÓN DEL CONSEJO Y ACUERDOS DE LA JUNTA DE ACCIONISTAS

La Junta ha aprobado la reelección como Consejero de Isidro Fainé, por un plazo de cuatro años, y ha ratificado el nombramiento como Consejero de Gonzalo Gortázar, reeligiéndole por igual plazo.

Repsol compensará todas las emisiones de la Junta General de Accionistas mediante la contratación voluntaria de créditos de carbono generados por un proyecto internacional de protección del medio ambiente.

Desde 2012, la compañía cuantifica y verifica la huella de carbono de este evento y compensa sus emisiones para conseguir que el balance de las mismas sea cero. De hecho, fue la primera empresa española en recibir el certificado de verificación de la British Standards Institution para esta clase de actos.