El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha participado este lunes en la cumbre ‘Empresas Españolas Liderando el Futuro’, organizada por CEOE, donde se ha mostrado convencido de que el mayor reto que tiene la economía española es “incrementar de forma sustancial nuestra productividad”. Para lograrlo, ha reclamado que las Administraciones creen “un caldo de cultivo capaz de atraer y retener talento e inversiones productivas” tanto nacionales como extranjeras, “lo que requiere contar con un régimen de seguridad jurídica y fiscal, un esquema excelente de educación y formación, así como la creación de unas condiciones en las que se valore y promueva la inversión”.
“Es la mejor forma de asegurar el nivel de vida de las personas y la financiación del Estado de Bienestar”, ha defendido, antes de señalar que “en este entorno que nos espera, el capital humano va a ser una variable decisiva” y “es imprescindible mejorar su empleabilidad, lo que pasa por dotarnos de una educación y formación que nos sirvan para enfrentarnos a los retos de un futuro que va a requerir habilidades muy distintas a las actuales”.
“La oferta de formación tiene que dar respuesta a las demandas presentes y futuras del mercado de trabajo, para todas las edades” y “en este esfuerzo las políticas activas de empleo deben jugar un papel muy relevante porque la formación no es solo el mejor medio de impulsar el crecimiento económico, sino que también es el mejor modo de reducir las desigualdades sociales y mejorar la cohesión social”, ha afirmado Goirigolzarri, para quien este es un reto “primordial” para la sociedad española. “Es el proyecto más importante, y además más inclusivo, que deberíamos proponernos como sociedad”, aseveró.
Sector financiero
El presidente deBankia ha explicado que la evolución de la economía tendrá un impacto directo en el futuro de las entidades financieras españolas y ha pedido “realismo, porque es evidente que esta crisis tendrá un impacto en el sector financiero, que es cíclico, y su rentabilidad depende del comportamiento de la economía”.
Por ello, ha reclamado que no se le exijan esfuerzos extraordinarios en estas circunstancias en forma de impuestos o requerimientos adicionales de cualquier tipo que mermen más su ya reducida rentabilidad porque, en ese caso, “no podrán cumplir con su objetivo de financiar a familias y empresas, es decir, no podrán apoyar la recuperación socioeconómica de nuestro país”.
Además, ha abogado por avanzar en la Unión Bancaria, que es clave para la competitividad de las empresas nacionales, porque es la “única forma de asegurar similares condiciones de financiación de las empresas en todo el territorio europeo”. “De otra forma, la nacionalidad de una empresa condicionará su coste de financiación y, por tanto, su competitividad”, ha reseñado. En su intervención en la cumbre de CEOE, el ejecutivo ha querido poner en valor la respuesta “excelente” de la banca durante esta crisis, tanto por la calidad ofrecida en los canales digitales, que han “funcionado magníficamente”, como, sobre todo, por la “enorme profesionalidad” de los equipos que han ofrecido sus servicios en las oficinas y por teletrabajo. Precisamente, sobre este aspecto, Goirigolzarri ha aconsejado que antes de legislar en materia de teletrabajo se haga “una reflexión y un contraste con los profesionales de los distintos sectores”.
El segundo aspecto que Goirigolzarri ha valorado sobre la aportación de la banca en esta crisis fue la financiación a familias y empresas, a través de moratorias de hipotecas y consumo para las primeras, y de extensión de líneas de liquidez y de préstamos, en parte avalados por el ICO, para las segundas.
Estas medidas, ha indicado, del saldo crediticio han beneficiado a más de 800.000 familias y 500.000 autónomos y empresas. Este esfuerzo de financiación, ha dicho, además de ser el más eficaz de Europa, junto al de los bancos franceses, ha permitido que en abril se haya producido un aumento en España por primera vez desde junio de 2009.
Como conclusión de su intervención, el presidente de Bankia ha querido expresar confianza en el futuro de la economía española. “Soy consciente de los enormes desafíos que tenemos por delante como sociedad, pero también creo que tenemos palancas muy importantes para enfrentarnos a estos retos, máxime si lo comparamos con otras crisis anteriores”, ha subrayado.
“Tenemos unas infraestructuras digitales muy notables, contamos con un fuerte apoyo por parte de las instituciones europeas y, además, tenemos unas condiciones financieras muy favorables para trabajar en la transformación de nuestro país. Es una oportunidad que no podemos desaprovechar”, ha concluido.