El BCE ya se ha puesto manos a la obra y este lunes ha comenzado a comprar titulizaciones, lo que forma una parte clave del paquete de estímulo con el que el organismo espera revivir la economía de la zona euro.

El BCE ya ha dado a los bancos la oportunidad de pedir préstamos de cuatro años y también se iniciará la compra de préstamos empaquetados o valores respaldados por activos (ABS) a finales de este año.

Un portavoz del BCE ha dicho que se han empezado las compras de estos activos por Francia, con la adquisición de bonos cubiertos de corta duración. El programa CB (covered bonds) es el destinado a comprar cédulas hipotecarias emitidas por los bancos, es decir, de financiación puramente hipotecaria. El BCE estaría aquí desahogando a los bancos de la mora de sus balances.

DEUDA FRANCESA A CORTO PLAZO:
DEUDA FRANCESA CORTO PLAZO

Fuente: Bloomberg

Por otro lado, próximamente el BCE también dará comienzo a la compra de ABS, lo que comúnmente se considera destinado a comprar deuda de empresas de carácter mediano y pequeño (PYMES). Para que un país pueda acceder al programa de compra de ABS, el país debe tener en marcha un programa con la UE para poder ser elegible. Los estrategas de Saxo Bank aplauden el programa ABS porque consideran que el problema de crédito no es sólo la demanda, sino que “los crecientes requisitos de capital y otras regulaciones obligan a los bancos europeos a poner límites sobre el suministro de crédito que no son suficientemente atractivos para los prestamistas. El programa ABS cambia esto”. Estos analistas también hablan del traspaso del riesgo y afirman que la creación de liquidez en el mercado ABS ayuda a los bancos a evitar la los límites impuestos por la regulación y, por lo tanto, relajar el acceso a crédito.