La ausencia de grandes campañas de garantizados
durante las últimas semanas ha supuesto una piedra en el camino de la recuperación. Estos productos habían impulsado el patrimonio durante el primer trimestre del año, con captaciones de 4,2 mil millones de euros. En abril, en cambio, han paralizado su actividad. En las tres primeras semanas del mes sólo un garantizado vio la luz y apenas sí se renovaron las garantías de una decena de fondos, éstos ltimos probablemente con el objetivo no de captar nuevo capital, sino de retener el patrimonio
gestionado.


A este descanso en la categoría de garantizados, se ha sumado la continuación de la tendencia de salida de patrimonio en losfondos de renta fija, que han perdido 558 millones de uros en el mes. La petición oficial de Portugal de un rescate del país reavivó cierto erviosismo en los mercados de deuda pública que hizo que la prima de riesgo de España olviera a marcar cifras por encima de los 200 puntos básicos.

Con todo, el patrimonio de los fondos sufrió una caída mensual de 940 millones de euros y se sitúa en los 144,9 mil millones de euros, por debajo de los 145,2 mil millones con los que cerró 2010.

Durante los tres primeros meses del año había sido la actividad comercial de La Caixa -que sumó 2,05 mil millones de euros- la que posibilitó el avance del mercado. En abril, en cambio, esta entidad perdió 79 millones de euros.

Entre las grandes entidades, la más perjudicada durante el mes de abril fue BBVA. Esta gestora sufrió salidas patrimoniales por valor de 480 millones de euros, motivadas, principalmente, por los vencimientos de garantizados y la ausencia de importantes captaciones en esta categoría, cuyas pérdidas ascendieron a 340 millones de euros.

El contrapunto a la caída generalizada de patrimonio lo pusieron las rentabilidades obtenidas en la gran mayoría de las categorías. A pesar de sufrir las consecuencias del desastre de Japón, la revisión del rating estadounidense y, sobre todo, el rescate de Portugal, los fondos cerraron el mes manteniendo las ganancias obtenidas en el primer trimestre. Sólo los productos inmobiliarios y los garantizados reflejaron rentabilidades negativas.