Desde nuestro punto de vista, los factores que contribuyen a la resistencia de esta clase de activos y a su apreciación son múltiples. Dado que dos terceras partes de los bonos convertibles son activos High Yield o no clasificados, el reciente reposicionamiento del High Yield hacia el Investment Grade en el marco de esta clase de activos ha permitido un aumento de la liquidez y de oportunidades de inversión.


En momentos en los que el mercado es presa de la volatilidad, los inversores suelen buscar oportunidades de inversión asimétrica, es decir, quieren participar de la progresión de los mercados de renta variable en los periodos alcistas y estar menos expuestos en las fases bajistas, un fenómeno conocido como “convexidad”.
Pensamos que los bonos convertibles ofrecen una solución interesante a la relación entre riesgo y rendimiento.

Además, las previsiones de una subida de tipos de interés en Estados Unidos deberían seguir impulsado al alza al dólar estadounidense. Históricamente, los bonos convertibles han mostrado una buena resistencia a la subida de las tasas a causa de su poca sensibilidad. La exposición global de nuestro fondo al dólar estadounidense es al día de hoy superior al 60%.

Las condiciones actuales, de intensos reajustes en el conjunto de los mercados, representan un excelente punto de entrada o de refuerzo para los bonos convertibles.  Mantenemos una actitud especialmente positiva en esta clase de activos ya que se beneficiará, en nuestra opinión, del repunte de los mercados de renta variable. Nuestros posicionamientos tácticos, una sobreponderación de los mercados de renta variable, una sensibilidad muy ligera inferior al 0,5, y nuestra selección de valores sobre bonos convertibles estadounidenses convexos para reducir el valor mínimo del bono representan a nuestro entender el mejor posicionamiento para beneficiarse de los mercados de acuerdo con nuestras previsiones macroeconómicas.

Seguimos manteniendo que, a largo plazo, los bonos convertibles presentan un perfil de rentabilidad/riesgo específico, con una rentabilidad cerca de la renta variable pero con un riesgo menor.