La noticia saltaba esta mañana cuando Almirall comunicaba a la Comisión Nacional del Mercado de Valores la intención de sus accionistas mayoritarios, los hermanos Jorge y Antonio Gallardo, de colocar 8,7 millones de acciones, que representan el 5,03% del capital social de la compañía. El bróker colocador ha sido Goldman Sachs y, según apunta la propia compañía, la operación se ha realizado entre inversores extranjeros cualificados. La titularidad de dichas acciones correspondía a las sociedades Plafín y Todasa, propiedad de los Gallardo.
El resultado de la colocación de Goldman Sachs ha sido de 102 millones de euros a partir de acciones vendidas a 11,75 euros. Es el precio al que, por cierto, ya ha llegado la compañía con una caída en estos momentos del 5% dentro del mercado continuo.
Tras esta venta, la familia Gallardo pasará a controlar aún el 66,65% del capital.
En todo caso, los accionistas mayoritarios despejan dudas al asegurar que siguen confiando en el proyecto y, de ahí que reiteren "su vocación de permanencia y respaldo a la compañía" en lo que apunta a ser una búsqueda de free float, sin más.
Cotización
Por el momento, y salvo sustos, Almirall es una de las compañías que engrosa las quinielas de los analistas de cara a 2014. Si en lo que llevamos de año se anota un 3%, es de reconocer el avance del 42% vivido en el último año por la compañía y los brókeres así lo reflejan.
Según el consenso recogido por Facset, tres de cada cuatro expertos apuestan por comprar los títulos de la farmacéutica e incluso conceden un precio objetivo que se encuentra por encima de su cotización actual, hasta los 13,12 euros por acción. Un 25% recomienda mantenerse neutral.
"La tendencia es claramente alcista", comentaba en su análisis con Ichimoku Francisco Javier Álvarez, de CFT.
De hecho, Antonio Espín, analista independiente, habla de una "posible figura de bandera" en la compañía. "Tras superar la resistencia de los 11.50 euros, hizo un pull back y estas figuras de bandera son positivas".
En este sentido, el analista de Renta 4 Banco, Eduardo Faus, considera que la recomendación pasa por 'mantener' los títulos de la farmacéutica, a pesar de que, en el corto plazo, se está situando en "una zona de soporte intermedio en 11,65 euros, previa a la zona de 10,5 euros". Es ahí donde, asegura el experto, "presenta la base del canal alcista desde los mínimos de principios de 2012".
La cuestión es que, a pesar de todo ello, hay reputados analistas que se preguntan en alguna red social cómo es esto de que los accionistas mayoritarios "vendan en máximos"... Veremos.