El presidente de ACS
, Florentino Pérez, ha sido acusado de “cometer fraude en la formulación de las cuentas de 2013 al no integrar en ellas las cifras del Castor que ACS controla en un 66,6% y que acumula un pasivo de 1.681 millones de euros al cierre del ejercicio”, así lo ha declarado Tomás Peña Barrena, ex director de Contratación de Dragados, filial de ACS.
Estas fuertes acusaciones salpican hoy al valor en bolsa, convirtiendo a ACS en uno de los títulos más penalizados de la sesión. La constructora se deja un 1,24% hasta los 32.32 euros y va a apoyarse en la directriz alcista que guía sus avances desde los mínimos de diciembre. Si logra mantenerse por encima de los 32 euros no habría que llevarse las manos a la cabeza, pues la tendencia alcista de más largo plazo seguiría incorrupta. Sin embargo, si perfora este nivel podría caer hasta los 32 euros en primera instancia, y hasta los 29,50 en segunda, donde tiene un hueco que aún no ha cerrado desde hace un mes.
En lo que va de año ACS acumula una revalorización del 30%, de las mayores del Ibex 35, aunque bien es cierto que desde mediados de marzo el valor se ha movido dentro de un lateral comprendido por los 29,50 euros por abajo y los 33,65 euros por arriba. Si lograra romper la resistencia de dicho canal alcista ACS volvería a colocarse en “subida libre”, ya que el nivel de los 33,65 euros supone su máximo anula e histórico.
El RSI se muestra en zona neutral en torno a 50 y el MACD está dando señal de compra, pues las dos líneas se cruzan al alza y superan la horizontal cero. (Apúntese a nuestras alertas de cambio de ciclo bursátil)
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