El consejo de administración de Meliá Hotels Internacional ha convocado la junta general de accionistas para los próximos 16 y 17 de junio, cuando se votará la elección de Luis María Díaz de Bustamante como consejero externo dominical en sustitución de María Antonia Escarrer, que presentó su renuncia al cargo el pasado 28 de febrero.

Así, Díaz de Bustamante presentará su renuncia como consejero externo independiente y será elegido por cooptación como consejero externo dominical, según ha informado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Además, se votará la ratificación y reelección como consejera externa independiente de Cristina Áldamiz-Echevarría y como consejera externa independiente de Montserrat Trapé Viladomat, junto con el número de miembros que forman el consejo de administración.

Según recoge el orden del día de junta, entre las propuestas a votación también se incluyen las cuentas anuales correspondientes al ejercicio de 2021, la aplicación del resultado del año pasado, el informe anual sobre remuneraciones de los consejeros y la reelección de Deloitte como auditor de cuentas de la sociedad y de su grupo para el ejercicio social 2022.

En relación con la remuneración variable a largo plazo del consejero delegado, Gabriel Escarrer, el consejo de administración ha dado 'luz verde' al plan para los ejercicios 2022 a 2024, ligado a los objetivos estratégicos de la compañía.

El importe objetivo (100%) de dicha retribución variable a largo plazo será el correspondiente a un 60% de su salario fijo anual por cada año de duración del plan, esto es, un total del 180% de su salario fijo, siendo el máximo a percibir un 150% de dicho importe target.

Los objetivos responden a la evolución valor de la acción, que tiene un peso del 30% sobre el total y se propondrá su aprobación en la junta general de accionistas; a la solvencia financiera, que tiene un peso del 40% sobre el total; a los objetivos de negocio, que tienen un peso del 20% sobre el total, y a los objetivos de sostenibilidad y posicionamiento, con un peso del 10% sobre el total.

En línea con los principios de buen gobierno, el pago de la retribución variable a largo plazo se producirá transcurrido un tiempo prudencial tras el cierre del último ejercicio del tercer año (2025), efectuándose dentro de los primeros 60 días naturales siguientes a la formulación de las cuentas anuales de dicho año.