El pasado 14 de marzo visitó Madrid Marc Saint John,  gestor de QUAERO Capital especializado en compañías de pequeña capitalización europeas.  Esta gestora, que utiliza un enfoque value, tiene un carácter profundamente contrarian del que pretende obtener un rendimiento por su actitud ante las inversiones, muy paciente.  

 

 

Saint John ofreció multitud de detalles sobre el estilo de gestión que lleva en dos de los fondos de la casa: QUAERO SMALLER COMPANIES, desde 2008,  y Argonaut, desde 2003 y centrado en microcaps, y que le han permitido obtener rentabilidades superiores al mercado y muy por encima de los índices de empresas de mediana y alta capitalización.  

La selección de las compañías pasa por el conocimiento de la misma, el sector así como los gestores y principales accionistas. Saint John siente predilección por aquellas compañías familiares pues suelen ser más prudentes en sus decisiones y eficientes en la gestión.  “Las primeras generaciones son más agresivas en el crecimiento y las siguientes se centran en hacer crecer el dividendo y mantener el posicionamiento logrado por la compañía”.

Una vez se decide a comprar acciones de una compañía, en muchas ocasiones hay una percepción muy negativa en el mercado sobre esa compañía y/o sector. Ahí está el enfoque contrarian de la gestora. De hecho, ese tono negativo en los mercados es un incentivo para comprar pues suele haber fuertes volúmenes de negociación (creados por las malas noticias en torno a la compañía) que son aprovechados para comprar acciones que, en otras ocasiones, llevaría semanas o meses.

Un equipo formado por tres gestores y tres analistas es el encargado de estudiar los fundamentales de las compañías y determinar si las circunstancias por las que el mercado está ignorando el negocio de dicha entidad es algo temporal. De ser así, será una candidata a entrar en el fondo.

La compañía, y como característica del puro enfoque value, debe tener poca deuda, aversión al riesgo, que valore el pago de dividendos y que esté cotizando a múltiplos razonables.  Muchas veces “estas compañías no las siguen casas de análisis, habitualmente más centradas en el universo de mayor capitalización”.

Marc destacó el hecho de que no eran habituales las reuniones de analistas y expertos con equipos directivos de las compañías y que rara vez, estas familias reciben llamabas o visitas de analistas y gestores, dedicados en su mayoría a revisar la información (balances, cuentas de resultados…) pública existente.