Las acciones de Telefónica, que ceden un 12% en 2016, se han visto castigadas por la inesperada noticia de que cancela la oferta pública de venta (OPV) de Telxius. La cancelación de la salida a bolsa supone un duro revés, ya que tenía como objetivo recaudar más de 1.000 millones de euros, una cantidad que suponía oxígeno para seguir cumpliendo los objetivos, incluyendo el dividendo de 0,75 euros por acción.
Telefónica no consideró adecuada la valoración de la compañía Telxius implícita en las órdenes de compra recibidas
La horquilla de precios de salida se había fijado entre 12 y 15 euros, lo que implicaba una captación de entre 1.090 millones y 1.364 millones de euros. Sin embargo, como ya había adelantado este jueves por la mañana Bloomberg, los inversores institucionales demandaban un precio más bajo para participar en la colocación. Una vez cerrado el mercado, Telefónica confirmó en un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su intención de cancelar la OPV, "por no considerar adecuada la valoración de la compañía Telxius implícita en las órdenes de compra recibidas".
De cara al futuro de Telxius, la operadora se limitó a decir que "seguirá analizando alternativas estratégicas en dicho activo". Ahora, todos los focos se ponen sobre su filial británica, O2, empresa que no pudo vender por el veto de Bruselas a Hutchison a principios de año tras cerrar un acuerdo de venta por valor de 12.500 millones de libras.
El 5 de septiembre, el mismo día que la empresa presidida por José María Álvarez-Pallete anunció su intención de sacar a bolsa hasta el 49% de Telxius antes de fin de año, también reconoció que "está analizando distintas alternativas estratégicas respecto a O2", y en todas ellas sería con Telefónica manteniendo la mayoría accionarial.
LA DEUDA ASFIXIA
Álvarez-Pallete ha confirmado en varias ocasiones desde que sucedió en la presidencia a César Alierta los objetivos de Telefónica. Entre ellos el dividendo. Sin embargo, el nivel de endeudamiento no lo pone fácil. El pasado 28 de julio la teleco presentó sus resultados semestrales, con una caída del beneficio del 42% hasta los 1.241 millones de euros. La reacción del mercado fue negativa, pero principalmente por el nivel de endeudamiento: aumentó en 1.980 millones de euros en el segundo trimestre en comparación con marzo, hasta un montante de 52.568 millones de euros. Esto se produjo, según justificó la compañía, por el abono de 1.950 millones a los accionistas en concepto de dividendos. El ratio de endeudamiento (deuda sobre Ebitda) alcanzó el preocupante nivel de 3,2 veces.
Ahora, la cancelación de la OPV de Telxius "es mala noticia para el valor", aseguran los analistas de Bankinter. "Esta OPV era el primer paso para definir la estrategia de desapalancamiento de su balance tras frustrase la venta de O2. Con los fondos recibidos Telefónica pretendía reducir su deuda. Esto reducía presión sobre su rating y también moderaba las dudas sobre su política de retribución al accionista", agregan estos expertos, que recomiendan vender, con un precio objetivo por debajo del actual en 8,6 euros. Asimismo, subrayan en Bankinter, "esta noticia pone en evidencia la dificultad para vender activos de la operadora y reabre la incertidumbre sobre todos estos asuntos".
