A pesar de que en España las coberturas vacunales en niños son altas, los profesionales sanitarios reconocen que no pueden relajarse ya que “la implicación del profesional sanitario en la promoción de la vacunación es fundamental para garantizar las actuales coberturas por encima del 95%. Si nos relajamos, es previsible que disminuyan significativamente y no podemos permitir que eso ocurra. Se podría decir que actuamos como muro de contención ante los mensajes desafortunados y cuestionables de las campañas antivacunas que lamentablemente tienen repercusión mediática”, reconoce el Dr. Jesús García Pérez, presidente de la Sociedad Española de Pediatría Social (SEPS), con motivo de la XVI Jornada de avances en vacunología.
Según declara el Dr. García Pérez, “las vacunas han supuesto para la salud de la población una medida de control fundamental. Gracias a ellas hemos conseguido disminuir la morbilidad y mortalidad de enfermedades infecciosas que causan graves consecuencias antes de iniciarse las campañas sistemáticas de vacunación. Esta situación nos sitúa en una posición de máxima responsabilidad en relación a la salud pública”.
¿Padres más o mejor informados?La tecnología ha favorecido una mayor accesibilidad a la información y una mayor inmediatez. “Si bien, desde un punto de vista cuantitativo es indudable que los padres tienen más amplio y fácil acceso a diferentes fuentes de información, cualitativamente otorgan mayor peso y credibilidad a la información que les facilita su médico”, señala Esteban Bravo, periodista y director general de Cícero Comunicación. “Se podría decir que hoy en día los padres están más informados porque acceden a la información de forma más sencilla, pero es discutible que estén mejor informados ya que en muchas ocasiones las fuentes de información que consultan no ofrecen información contrastada con base científica. Por ello, es importante conocer las fuentes de información de consulta habitual por los padres. No obstante, en líneas generales, los padres tienen plena confianza en los consejos de los profesionales sanitarios y toman decisiones responsables en materia de prevención” añade el Dr. García Pérez.
Según pone de manifiesto Esteban Bravo, “el nivel de influencia de los medios de comunicación, redes sociales y profesionales sanitarios es, cada uno en su medida, muy alto. Por ello han de ser especialmente sensibles en todo lo referente a la información en materia de vacunas. En el caso concreto de los medios de comunicación, la norma común es informar desde la responsabilidad y el rigor; el problema es que cuando se da una información frívola, ausente de rigor, sin contrastar, negativa…tiene un impacto muy importante entre la opinión pública”·