MADRID, 12 AGO. (Bolsamania.com/BMS) .- La nueva Ley de Auditoría de Cuentas, en cuyo anteproyecto trabaja actualmente el Gobierno, establecerá una rotación obligatoria auditando las cuentas de la misma empresa de interés público. Este punto afectará especialmente a las empresas del Ibex, la mayoría de las cuales han superado el periodo que marca la nueva ley.
Según recoge Europa Press, el borrador será aprobado en los próximos meses pero no entrará en vigor hasta principios de 2016. La intención del Ejecutivo es reforzar la autonomía de los auditores, para lo que se propone impulsar un modelo de organización más crítico hacia la información que dan las empresas auditadas y más independiente, para prevenir conflictos de interés de cualquier tipo.


En su última comparecencia antes de las vacaciones, el ministro de Economía, Luis de Guindos, mencionó que se establecerá una rotación externa obligatoria tras un periodo de ocho años, incluyendo renovaciones, auditando las cuentas de la misma empresa de interés público. Con este límite, el Gobierno va más allá de lo que establece la Comisión Europea, que da hasta 15 años para la rotación obligatoria en el caso de las empresas cotizadas y de interés público.


En el caso del Ibex 35, más de la mitad de las compañías han sobrepasado ya los ocho años que marcará la nueva ley. En el caso de Grifols, Dia, Indra, Repsol, FCC, OHL, Banco Santander, Banco Popular, Banco Sabadell y Técnicas Reunidas ya son más de 20 años con la misma empresa auditora.
Asimismo, son cuatro las auditoras que se reparten las empresas del Ibex 35: Deloitte, Ernst & Young, KPMG y PricewaterhouseCoopers.