En esta situación, las bolsas son las principales afectadas “y los beneficios tampoco son de un gran crecimiento con lo que un factor no descontado, como son estos riesgos, provocan movimientos en los índices”. Aun así, “la tendencia todavía es positiva, la inflación está controlada, las rentabilidades de los bonos son muy bajas aun con riesgo de posible burbuja, la tendencia sigue siendo positiva”.
La calidad de los beneficios empresariales es correcta pero no tenemos un crecimiento de doble dígito.

Pero ¿aprovecharía correcciones para tomar posiciones en renta variable? Dentro del corto plazo, en los próximos días puede ser aconsejable no entrar pero con algo de liquidez se pueden buscar compañías bien gestionadas, con deuda controlada y que hayan podido ser castigadas en el corto plazo y son una oportunidad para ir entrando.

¿Provoca Banco Espírito Santo más daño que los riesgos geopolíticos? Aunque estas cosas no están previstas, la preocupación del mercado está en la economía. Que Portugal tenga problemas de inflación y de balance, preocupa a los inversores porque es algo estructural. Los temas geopolíticos son de corto plazo pero en el transcurso de los próximos meses, si la situación se normaliza, desparecerán las tensiones.

Para los ahorradores, el principio básico es tener cartera diversificada que combine todo tipo de activos y aproveche que la liquidez que vaya entrando. Si vamos asumiendo más riesgo hacia activos de renta variable iríamos hacia alternativas como los propios bonos, que da la impresión de que continuará. En renta fija conservaría un poco posiciones pues el rally ha sido fuerte pero podemos ver cómo el bono alemán tiene un componente de riesgo pero el activo máximo de calidad es una buena alternativa para diversificar.