MADRID, 21 JUL. (Bolsamania.com/BMS) .- En la sesión del viernes tuvimos el enésimo ejemplo que demuestra que hay que esperar al cierra para saber si de verdad un soporte se perfora o no. El cruce marcó un mínimo en la sesión en los 1,3489 colocándose por debajo de los 1,3501 pero cerró en los 1,3524. Es decir, no perforó soportes. Esto hace que de nuevo la ecuación rentabilidad-riesgo, para trading, sea óptima por el lado largo (o alcista) colocando un stop loss, en cierres, por debajo de los 1,3475 (mínimos del pasado mes de febrero). Así, en la medida en que no se pierda el nivel de los 1,3475 lo cierto es que podemos tener continuidad en el rebote hacia los 1,3574 y, por encima, los 1,3651.
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