Si deseas tener una casa en propiedad, lo habitual es necesitar un préstamo hipotecario para poder acceder a la compra de una vivienda, sobre todo en los últimos años ya que los precios de las viviendas han crecido de manera exponencial. Por todo ello es bueno recurrir a un comparador de hipotecas para así poder buscar la mejor opción para ti.
Las hipotecas no vienen con instrucciones, por lo que a veces es complicado saber más sobre ellas. Por esto, vamos a contarte algunas de las cosas que no te dicen o que si lo hacen no es con la debida claridad, pero que sí que debes valorar.
¿Cuánto dinero se pide al contratar la hipoteca?
Aunque parezca algo obvio, estamos ante la parte de mayor importancia. Hasta no hace muchos años se pensaba que era posible entrar en un banco para solicitar una hipoteca y se salía con dinero para adquirir la vivienda y además reformarla, amueblarla y comprarte un coche. Todo eso acabó y ahora los bancos son bastante menos generosos. Primero porque este punto se ha regulado en estos últimos años y por lo que cada vez es más difícil conseguir financiaciones que supongan el 100% del valor de compraventa.
Ahora no es tan fácil que los bancos ofrezcan más del 80% del valor de la compra, por lo que cuando no tengas el 20% restante es posible que te quedes sin la deseada vivienda.
Debes conocer el tipo de interés e índice de referencia de las hipotecas
De los conceptos que tienes que saber sí o sí es el tipo de interés. Con él sabrás el tanto por ciento que deberás pagar al banco por el préstamo del dinero.
Aunque tengas escasos conocimientos en materia económica y financiera, ahora debes saber que en la actualidad los tipos de interés son muy bajos. Esta es una magnífica noticia, puesto que así te va a costar menos devolver el dinero que te haya prestado el banco.
¿Qué es el tipo de interés de una hipoteca?
Cuando vas a solicitar una hipoteca te puedes encontrar con tres tipos, la hipoteca fija, la mixta o la variable. Cada una de ellas tendrá un tipo de interés diferente que funcionará de forma diferente a la hora de calcular los intereses que tendrás que pagar a la entidad financiera por la contratación del préstamo.
Si el tipo de interés es fijo y por ejemplo es del 2%, durante todos los años que dure la hipoteca pagarás ese porcentaje de intereses. En el caso de la hipoteca variable, tendrás un interés fijo, que por ejemplo puede ser del 0,5%, al que habrá que sumarle el índice de referencia elegido que normalmente suele ser el euríbor. Este dato irá variando según las revisiones que se hayan acordado en el contrato, lo más habitual es que sea cada alos.
Por último, nos quedará la opción mixta. Que consiste en dividir la hipoteca en dos fases, unos años actuará como fija y los otros años como variable. A la hora de negociar el préstamo se establece cuantos años corresponderá a cada parte.
Gastos, comisiones y las cláusulas de las hipotecas
Todo trato que hagas con un banco tiene una serie de comisiones y gastos. Lo mejor es que en ellas vas a poder negociar en algunos casos y que sean más favorables para ti.
Por este motivo es vital que sepas las condiciones del contratro hipotecario ya que hay que tener en cuenta las comisiones de apertura, cancelaciones anticipadas o parciales, gastos de notaría, etc. Algunos es posible negociarlos, otros eliminarlos, etc.
Productos accesorios que modifican las condiciones del préstamo hipotecario
De las prácticas más habituales que se producen en los préstamos hipotecarios es incluir vinculaciones como: domiciliación de la nómina, recibos, contratación de las tarjetas o incluso los seguros de vida.
La Ley dice que un banco no puede obligarte a que contrates servicio alguno como condición, a excepción del seguro contra incendios, que hay que hacerlo sí o sí por ley, por lo que rebajan el diferencial de la hipoteca al premiarte por los productos accesorios que vayas a contratar.
Si tienes dudas sobre el préstamo hipotecario, pide que te lo expliquen
Cuando no se tiene todo claro, lo mejor es expresar las dudas que puedas tener. No debes tener prisas a la hora de formar tu hipoteca, aunque tengas muchas ganas de adquirir la casa o creas que no se te dan bien entender estos temas financieros. Al final lo más probable es que pases bastante tiempo con dicho préstamo, por lo que lo más recomendable es que no dejes cabos sueltos.
En este punto contar con un asesor hipotecario es importante para que pueda resolver todas tus dudas y proporcionarte la información necesaria para que conozcas todo bien. Además, conviene no olvidar que existen bastantes asociaciones o sitios web de internet en los que es posible recabar toda la información necesaria.
Algo que también te recordamos es que es posible preguntar al notario antes de que se produzca la firma. Lo mejor es que esto no se produzca en el mismo día, puesto que así va a poder informarte sin presiones.
