MADRID, 26 FEB. (Bolsamania.com/BMS) .- Lo que tienen las crisis es que los más optimistas, o los que tienen la posibilidad de serlo, lo consideran una oportunidad. Por eso hoy, ante el mal comportamiento de Credit Suisse y UBS por la presión que está sufriendo la banca suiza desde Estados Unidos, donde se acusa a la primera de las entidades desde el Senado de Washington de utilizar “tácticas” que incluyen paraísos fiscales, algunos esperan que la banca italiana y española se beneficie. Jerome Schupp, responsable de análisis del banco helvético SYZ, ha comentado en Reuters que muchos gestores de fondos podrían fijarse en cómo se comportan los bancos españoles e italianos ahora que sus economías se recuperan. Un fenómeno necesario para ver un rebote en las bolsas de ambos países: “Los mercados de España e Italia deberían ser soportados por un rebote de su sector bancario”.
De momento, hoy la bolsa española, como las europeas, ha terminado con caídas. El Ibex 35 se ha dejado un 0,18%, hasta los 10.224,30 puntos. “Pese a que las bolsas europeas han cerrado alejadas de los mínimos de la jornada, se ha impuesto un esquema descendente, mientras que en Wall Street ha ocurrido lo contrario”, explica el estratega de IG Markets, Daniel Pingarrón. Explica este experto que la diferencia a ambos lados del Atlántico ha sido un muy buen dato de ventas de viviendas nuevas en Estados Unidos por un lado, y el hecho de que por primera vez la crisis de Ucrania haya tenido un impacto en las bolsas europeas, tras la aparición de informaciones durante la tarde que apuntan a cierta movilización de tropas rusas. “Ucrania lleva ya varios días acaparando titulares en prensa, pero su efecto en los mercados financieros internacionales no se ha visto hasta ahora. Y desde luego que es un asunto que puede tener más recorrido, máxime si se combina con la fuerte caída del yuan chino y de la lira turca, cuestiones que tampoco han impactado por el momento”, indica.
Su visión del mercado es la siguiente: “En el caso de que el índice director de Wall Street, el S&P 500, se acomode en nuevos máximos históricos, y la cuestión ucraniana vuelva al ostracismo, podría desatarse un impulso alcista en Europa, que llevaría al Ibex 35 hacia sus máximos anuales, por encima de los 10.500 puntos. El comportamiento de los blue chips, que han venido lastrando al selectivo desde mediados de enero, está mejorando, tendiendo a asemejarse con el desempeño general del índice, salvo en el caso de Inditex”.
Atención, no obstante, porque “el entusiasmo de este año en las bolsas ya no es ciego como el año pasado”, advierte en Bloomberg Tobias Britsch, de la firma alemana Meriten Investment Management. “Los inversores saben que no habrá victorias fáciles (…) Es improbable que las bolsas corran por delante de los beneficios de las empresas”, avisa, porque considera que “las valoraciones no son baratas y hay algo de nerviosismo presionando a los inversores para que sus posiciones se tornen algo más conservadoras”. Considera este experto de las mejoras en el crecimiento económico y el rebote de los beneficios empresariales aún deben comprobarse antes de que los inversores se vuelvan más agresivos”.
Cautela, por tanto, la que piden algunos expertos, en un momento en el que hay quienes incluso advierten sobre que éste sea el mercado alcista más débil de la historia. Es lo que se cuestiona en la siempre interesante Seeking Alpha, Ronald Delegge, editor de ETFguide.com y asesor de inversiores desde hace 11 años. Rememora Delegge las palabras de Charles Mackay, periodista y poeta escocés, que publicó en 1841 “Memoirs of extraordinary popular desilusions, and the madnes of crowds” (“Memorias de extraordinarias ilusiones y de la locura de las multitudes”). Este autor explicaba las denominadas “manías” o estupideces multitudinarias. Dijo Mackay que “los hombres piensan como rebaños. Se vuelven locos en manada, pero cuando uno recupera de la turbación sus sentidos, el resto lo va haciendo uno a uno”.
María Gómez