MADRID, 29 NOV. (Bolsamania.com/BMS) .- “Normalmente, si usted piensa en comprar una acción (o un ETF) y la primera pregunta que se plantea es ¿cuánto dinero voy a ganar?, entonces, no está razonando como un trader profesional. La cuestión principal que se plantean estos especialistas no trata sobre los beneficios, sino sobre las pérdidas. Se dicen a sí mismos ¿cuánto dinero podría perder?. En otras palabras, identifican primero el riesgo, porque él conduce al resto de decisiones”, afirma tajante Patrick J. O'Hare, analista jefe de Briefing.com. Esta advertencia, explica, “es importante tenerla en cuenta ahora que muchos inversores minoristas se sienten cada vez más frustrados” por no participar en este mercado que encadena subidas día sí y día también, con pocos retrocesos (o muy breves) como para aprovecharlos para “subirse al tren”.

No sabemos, indica este analista, “si el mercado está, o se acerca, a un techo. Podría ser, pero como se suele decir, no va a avisarnos de que así es. Ahora bien, lo que sí hay son ciertas señales de alarma que debemos conocer a la hora de plantearnos cuál va a ser nuestra tolerancia al riesgo en una renta variable impulsada por el momemtum”. Por ejemplo, indica, debemos tener claro que cuando un valor (o un ETF) “escala posiciones porque los inversores/traders simplemente persiguen el precio, cuando su comportamiento se dé la vuelta y se vuelva negativo, lo hará rápidamente” y las pérdidas serán para usted si se ha quedado como uno de los últimos de la persecución. “Por esto, es crucial identificar los riesgos que estamos dispuestos a asumir”, destaca.

En su opinión, hoy por hoy el mercado se ha revestido de un “aura de invencibilidad” asentada sobre la creencia en el Rally de navidad, la tendencia de la bolsa a comportarse de forma positiva al cierre del ejercicio, así como al inicio del mismo... “Los inversores se han olvidado de 'lo malo'”, advierte, y esto se ve claramente en el hecho de que el índice VIX de volatilidad se encuentre cerca de mínimos de 2011. Sin embargo, O'Hare también identifica ciertas “advertencias” que debemos tener en cuenta para mantenernos alerta: el margen de la deuda en el NYSE está en máximos históricos; el valor del Wilshire 5000 (que engloba a todas la cotizadas estadounidenses) es mayor que el PIB de Estados Unidos; los debuts en bolsa están siendo “explosivos”; hay tendencia a “estirar” los temas de inversión; y mucho dinero está dirigiéndose a inversiones alternativas...

¿Qué significa todo esto? “La renta variable lo está haciendo realmente bien: sube con las buenas noticias, repunta también con las malas y cuando los valores ceden lo hacen por poco tiempo. El S&P 500 acumula ganancias del 8% en los últimos tres meses y del 26% en lo que va de año. La percepción generalizada es que noviembre y diciembre son meses históricamente favorables para el mercado, y enero se beneficia del desembarco de los bonus de final de año... entendemos porque los inversores apuestan por la bolsa (…) pero no podemos dejar de señalar los avisos que nos muestra el mercado. Y eso está bien, no estamos diciendo que el techo esté aquí. Simplemente dejamos un consejo: Cuando parece tan fácil hacer dinero en bolsa, muchas veces es cuando ésta nos muestra que no está exenta de riesgos (…) tenga en cuenta los 'toques de atención' a la hora de hacer sus inversiones, porque estos apuntan a que si hay una 'vuelta' será significativa si el sentimiento cambia por cualquier razón”.

De momento, el optimismo sigue primando. Las bolsas europeas han subido esta semana un 0,90% de media. En concreto, el Ibex 35 partirá el lunes de los 9.837,60 puntos, tras subir un 1,65% durante estos cinco días. Explica José María Rodríguez, analista de Bolsamanía, que el cierre semanal del selectivo español es “muy interesante”, ya que “los mínimos de la semana pasada podrían haber encontrado suelo a las puertas de la directriz alcista más inmediata”. Este experto señala que “da la sensación de que en cualquier momento podríamos atacar la resistencia que suponen los máximos anuales (10.064 puntos)". Sin embargo, en el más corto plazo, aconseja cautela, y es que el rally experimentado por la banca desde mínimos de la semana pasada ha sido muy importante y, además, BBVA, está a las puertas de una importante zona de control. Los primeros soportes están en los 9.850 y los 9.750 puntos, concluye.

Sara Carbonell