Wall Street abrió plano la sesión, pero en minutos la disparidad se instaló en el parqué neoyorquino, después de las palabras del presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke. Por un lado ha tranquilizado a los inversores apuntando a que la Fed está estudiando conceder más tiempo a las empresas de Wall Street con problemas de liquidez para obtener préstamos de emergencia de manera directa del banco central, lo que les ayudaría a superar los actuales problemas de crédito. Y, por otro, ha pedido al Congreso que el banco central disponga de mayores poderes para poder vigilar de manera más efectiva el sistema financiero, y posiblemente incluso supervisar la liquidación ordenada de empresas consideradas críticas para el funcionamiento del sistema. Por el lado macroeconómico, se han publicado las ventas pendientes de vivienda en EE UU que bajaron hasta el 4,7% en mayo. Peor de lo previsto, ya que el mercado esperaba una caída del 3%, frente a los 6,3% registrados en el mes anterior. Además, se han conocido los inventarios al por mayor en EE UU que subieron un 0,8% en mayo. Los analistas auguraban una subida del 0,6%, frente al 1,3% en el mes anterior. Y, el el índice de ventas de cadenas minoristas en Estados Unidos de The International Council of Shopping Centers-UBS que ascendió un 0,2% durante la semana al 5 de julio, frente a la semana previa, sobre una base ajustada por factores estacionales y de tiendas comparables. Mientras, el petróleo parece que se relaja por segundo día consecutivo. El barril de crudo West Texas, en los 138,68 dólares el barril. Compañías relacionadas con el sector como
ExxonMobile pierde un 1,38%, Coconophilips
cae un 2,01% y Chevron se deja un 1,11%.Gráfico Dow