Finalmente y como todos los analistas apuntaban, la semana pasada el Banco Central Europeo, hacía efectiva en la reunión del jueves del Consejo de Gobierno, la subida de tipos de interés. 

La subida de 25 PB eleva el precio del dinero, que durante los dos últimos años se encontraba en mínimos históricos, al 1,25%. Esta subida tendrá menores consecuencias para las economías más saneadas de la zona euro como Alemania o Francia que se encuentran en una fase avanzada de su proceso de recuperación, pero podría agravar la situación de otras que se encuentran fuertemente endeudadas como (Grecia, Irlanda o Portugal) o aquellas que están teniendo un proceso de recuperación más lento (como España o Italia).

La gráfica refleja la evolución de los tipos de los últimos veinte años y como se puede observar pese a la subida seguimos cerca de los mínimos históricos.

 

El principal objetivo de la subida en el precio legal del dinero es  el de controlar la tendencia inflacionista que estaba afectando a la zona euro, esta ascendía en el mes de Marzo hasta el 2,6% muy por encima del 2% que se marca como objetivo el BCE. Muchos son los analistas que afirman que dicha inflación es más resultado de la escalada del precio del petróleo (que durante los últimos días ha superado por primera vez desde 2008 los 124 dólares por barril, debido a las inestabilidades políticas de los principales países exportadores) que de un aumento real del consumo.
 
El endurecimiento de la política monetaria por parte del BCE puede tener efectos negativos sobre la competitividad de las empresas de la zona euro, al hacer el euro una moneda menos atractiva para los inversores.
 
 Tras esta subida el EUR marca máximos de 15 meses en su cotización contra el USD alcanza 1,443 restando competitividad a las exportaciones de la zona euro.
 
 


Las palabras de Trichet sobre la necesidad de mantener una actitud de “vigilancia” ante los riesgos inflacionistas hacen pensar que esta no será la única subida que tendremos que afrontar este año, las futuras subidas podrían hacer que los tipos se acercaran al 2%. La política monetaria del BCE contrasta con la del Banco de Inglaterra y La Reserva Federal que dan prioridad al crecimiento económico sobre la inflación y que hasta el momento mantienen sus tipos en mínimos históricos.
 




Como última consecuencia, la repercusión de la subida de los tipos de interese ha hecho que el euribor a 12 meses, el que mide el interés de los préstamos interbancarios y es la referencia de la mayoría de las hipotecas de tipo variable, se encuentre esta semana por encima del 2%, lo que supone una perdida de capacidad adquisitiva para las familias.