La aerolínea irlandesa ha declarado unas pérdidas de 10,3 millones de euros en el último trimestre. Según ha explicado el director ejecutivo de la empresa Michael O´Leary, detrás de estas pérdidas estarían los temporales de nieve y las protestas de los controladores lo que en total han provocado más de 3.000 cancelaciones de vuelos.
 
Aún así la empresa mantiene sus estimaciones de crecimiento para el presente ejercicio.