El oro vuelve a servir de refugio en momentos de pánico. La cotización del metal precioso sigue cosechando récord tras récord. Hoy el metal amarillo ha cerrado en los 1.824 dólares lo que supone la primera vez que la cotización de este activo supera los 1.800 dólares por onza; todo ello debido a los nuevos desplomes en las bolsas europeas y americanas por unos malos datos macro en EEUU que hacen renacer los viejos temores sobre la recuperación.